Foto Cortesía.
Diez años del fallecimiento de Alexis Argüello
El recuerdo del "flaco explosivo" sigue presente en los nicaragüenses, ganador de tres coronas mundiales. Es el más grande atleta producido por la tierra de lagos y volcanes.
No existe un atleta con tanto impacto en el deporte nicaragüense como Alexis Argüello. El “flaco explosivo” conquistó el corazón de miles de fanáticos del boxeo en la década de los 80 y ganó el respeto a nivel internacional con sus victorias dentro del ring.
La afinidad de Alexis con el público pinolero aún permanece vigente a 10 años de su partida. Es un auténtico ícono, una leyenda cuyas historias permanecerán vigentes al paso siempre cruel del tiempo.
Oriundo del barrio Monseñor Lezcano, Argüello cumplió el sueño que se trazó desde pequeño que era convertirse en campeón mundial y realizar una carrera llena de reconocimientos, elogios, gallardía, pero sobretodo humildad y respeto hacia sus rivales y el deporte de los guantes.
Imborrables serán las batallas realizadas por este guerrero arriba del cuadrilátero, las victorias sacadas de un último suspiro como contra Rubén Olivares para ganar la primera de sus tres coronas.
Las batallas sin cuartel contra Alfredo Escalera derrotándolo en su natal Puerto Rico, las peleas contra Ray “boom boom” Mancini o el “bazuca” Limón, dignas de coleccionarse y tenerlas como reliquias.
Incluso en la derrota, Argüello era grande, nadie olvida esas peleas contra Aaron Pryor donde el “caballero del ring” una vez más dejó todo de su ser en busca de la gloria.
Ser del salón de la fama del boxeo, con tres coronas mundiales en distintas categorías pueden ser las principales cartas de presentación en la carrera de Alexis, pero el sentimiento de todo un pueblo orgulloso de su héroe es el más grande de sus méritos.
A 10 años de la partida de Argüello su legado está presente en la mente y corazones de los nicaragüenses, ¡grande Alexis! como vos no habrá jamás otro.
