Cristofer Rosales viaja a Japón con la ilusión de ser campeón del mundo
Cristofer Rosales tiene la misión de vencer al local Daigo Higa el 15 de abril en Japón para conseguir el título mundial de las 112 libras versión CMB.
Cristofer Rosales empacó sus maletas rumbo al país del sol naciente en busca de conquistar su más grande sueño: convertirse en campeón del mundo. La oportunidad que la vida le brinda a Rosales está pactada para el 15 de abril ante el nipón Daigo Higa, un campeón de extraordinarias proporciones que tiene un récord de 15 victorias todas por la vía del nocaut.
Rosales no es el favorito, pero tiene un corazón inmenso, un boxeador que siempre se entrega dentro del ring. A eso le suma su férrea disciplina, además de una buena preparación a cargo de su entrenador, Roger González, y su preparador físico Wilmer Hernández.
Para la pelea contra Daigo Higa el nicaragüense realizó sesiones de guanteo con Román González, también con Félix Alvarado, para asimilar la pegada del boxeador asiático por demás respetada. La estrategia a utilizar, según mencionó el mismo Cristofer antes de irse a Japón, es desgastar en los primeros 4 asaltos su rival, para luego entrar en la zona corta descargando toda su metralla la pelea entonces será de fuego cruzado.
El combate puede decidirse por nocaut
Debido a la ferocidad, agresividad y tren de pelea del japonés, todo tinta para que el combate se decida por el nocaut a favor de cualquiera de los boxeadores. Cristofer tiene técnica es capaz de moverse bien en el ring pero tampoco rehúye a intercambiar golpes en la zona corta.
Si la pelea entra en el intercambio es vital la preparación para soportar el golpeo, también conectar las manos potentes que puedan inclinar la balanza a favor del nicaragüense. Rosales no es favorito para imponerse, pero tiene condiciones, deseos y hambre que lo motiva a materializar su sueño desde que era pequeño ser monarca mundial de boxeo.