Dos años de espera para poder volver a Tailandia y tener su revancha ante CP Freshmart, ahora solo horas separan a Byron Rojas de subir al ring en busca de la corona mundial.

Este miércoles en el país asiático se realizó la ceremonia de pesaje donde fiel a su costumbre no tuvo ningún problema en marcar la categoría incluso por debajo del límite de las 105 libras, Rojas marcó 104.5 al igual que su rival.

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La preparación para esta pelea ha sido de las mejores de la carrera del matagalpino reconcentrado en Managua y con mucha entrega en el gimnasio.

Objetivo el nocaut

Ganar en Tailandia no es cosa fácil, se sabe de antemano que los jueces protegerán al local a capa y espada, entonces se debe abrumar a su oponente para sacar la pelea por los puntos, o bien como lo realizó Félix Alvarado en Filipinas: sacar el éxito por la vía del nocaut.

El “Gallito” está consiente de todas las formas cómo puede resultar la pelea, sabe perfectamente que Freshmart es un boxeador mañoso y que debe mantener la iniciativa en todo el pleito.

Rojas no se caracteriza por una pegada demoledora aunque ha ganado fuerza bajo las ordenes de Wilmer Hernández, la estrategia se basa en mermar las condiciones del tailandés con golpes certeros al cuerpo que quiten movilidad, una vez conseguido eso Byron debe aprovechar el momento y ganar el combate.

Hernández ha mencionado que en el noveno asalto podremos ver a un Freshmart cansado y agobiado por las detonaciones del pinolero, Rojas menciona que no tiene miedo y observa algo de incertidumbre en el seno del tailandés.

El “Gallito” quiere ser campeón del mundo para ello, el esfuerzo y entrega dentro del ring es la clave, confiemos en el pequeño guerrero de la perla del septentrión, Rojas batallará por ser nuevamente campeón.