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El coronavirus aumentará el trabajo infantil, advierten la Cepal y la OIT
Más de 300,000 menores de edad se verán obligados a trabajar a causa de la pandemia, asegura informe
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), advierten que la crisis provocada por la pandemia del coronavirus, podría causar que más de 300 mil niños, niñas y adolescentes se vean obligados a trabajar.
Ambos organismo explican a través de un análisis, que la desaceleración de la producción, el desempleo, la baja cobertura de protección social y los mayores niveles de pobreza, serán unas de las condiciones que favorecerán el aumento del trabajo infantil.
El economista Luis Murillo, refiere que en el caso de Nicaragua, por ser una economía de un 70% de empleo informal, muchas familias involucran a todos sus miembros en el trabajo, incluyendo los menores de edad.
En Latinoamérica, el porcentaje de niños, niñas y adolescentes que están en situación de trabajo infantil están en el rango de edad de 5 a 17 años y se estima que hasta el momento existen un total de 10.5 millones, de menores en esa situación, sin embargo, este 2020 la cifra podría aumentar ente 1 a 3 puntos porcentuales en la región.
Por su parte, la Federación Coordinadora de ONG que trabaja con la Niñez y la Adolescencia (Codeni) coincide con el informe de Cepal y OIT, en que este año la cifra de trabajo infantil aumentará considerablemente, sin embargo, surgieren que para frenar este flagelo es necesario aplicar políticas gubernamentales de forma integral.
“Se debe frenar el hecho de que los niños estén en los semáforos pidiendo para luego llevarle el dinero a sus padres, aquí requerimos acciones integrales de parte del Gobierno y que no solo sean medida apaga fuegos solo para sacar de un lugar a los niños que están trabajando sin darle seguimiento" manifestó Marvin García, especialista de Codeni.
En Nicaragua, la última vez que el Estado dio a conocer las cifras oficiales del trabajo infantil fue en 2012, cuando se registró que aproximadamente 396,000 niños y adolescentes laboraban, principalmente en la zona rural del país, mientras otros ejercían el trabajo en la ciudad.
