Recomendaciones para impulsar la economía tras la pandemia

Para la recuperación económica post pandemia del sector agro alimentario de los países de América, el cooperativismo y la asociatividad serán determinantes para alcanzar este objetivo, señalaron recientemente expertos y representantes de diversos sectores, en un dialogo virtual promovido por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA).

En este sentido, Roberto Rodrigues, ex ministro de agricultura de Brasil y catedrático en agronegocios, explicó que a lo largo de la historia, la doctrina del cooperativismo ha visto las grandes crisis como la revolución industrial y la globalización de la economía, como oportunidades para consolidarse.

Según Rodrígues, la actual pandemia del coronavirus, la mayor crisis mundial de los últimos 100 años que ha dejado miles de fallecidos, altos niveles de desempleo por el colapso de las economías, pobreza y profundización de las desigualdades sociales; es otra oportunidad para que el cooperativismo tenga un crecimiento fuerte desde el tema agrícola y en el crédito.

Ariel Guarco, presidente de la Alianza Cooperativa Internacional (ACI) coincidió en que “el cooperativismo tiene mucho para aportar. Por ejemplo, más de 1,500 cooperativas en Brasil son responsables de más de un millón de asociados, por los que pasa el 50 % de la producción agrícola del país; en Argentina más del 22% del acopio de granos se da a través de cooperativas que tienen instalaciones portuarias propias, y Estados Unidos cuenta con más de 2,000 cooperativas y de dos millones de asociados”.

Recientemente, el IICA, ha destinado una pre inversión para un proyecto sobre la gestión digital de servicios cooperativos a la producción comercialización para los productores agrícolas familiares en las Américas, según informó su director general Manuel Otero.

“Precisamos utilizar más y mejor las tecnologías digitales disponibles para bajar costos de transacción, para fortalecer el papel de las empresas cooperativas, como concentradoras de las capacidades productivas de la agricultura familiar y en su rol de articulación de oferta, demanda y agregación de valor”, detalló.

Pedro Martel, jefe de la División de Medio Ambiente, Desarrollo Rural y Manejo de Riesgos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), señaló el interés de dicha organización de financiar desde el sector público la agricultura familiar y las transferencias de tecnología a distancia para potenciar las oportunidades de este sector, ya que es parte del cooperativismo y del desarrollo de la empresa privada agroalimentaria.

Martel afirmó el BID cuenta con diferentes mecanismos que podrían implementarse para este objetivo como préstamos, cooperación no reembolsable, inversión privada entre otros.