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BCN eleva proyección de crecimiento económico para este año
El nuevo cálculo de la entidad, dista de las estimaciones que compartió en un informe la Cepal a inicios de septiembre de este año.
La economía de Nicaragua podría cerrar este año con un crecimiento mayor al que estimó a principios de este año, según una nueva proyección del Banco Central de Nicaragua (BCN) publicada el pasado jueves en un documento sobre “Perspectivas Macroeconómicas 2023.
El BCN calcula que, al cierre de este periodo, el crecimiento esperado del Producto Interno Bruto (PIB) esté entre un 3.0 y 4.0%, superior a los 2.5 y 3.5 por ciento, que proyectó previamente a mediados de este año.
“Dado los resultados positivos al tercer trimestre, el escenario macroeconómico de 2023 se ha mejorado conforme al presentado en julio en el Informe de Política Monetaria y Cambiaria del BCN. El escenario macroeconómico se perfila positivo, sustentado en el comportamiento de un conjunto de variables (PIB, IMAE, exportaciones, recaudación, crédito, remesas, turismo, entre otras), así como la evolución positiva de los principales socios comerciales del país”, sostiene.
El nuevo cálculo de la entidad, dista de las estimaciones que compartió en un informe la Comisión Económica para America Latina y el Caribe (Cepal) a inicios de septiembre de este año, dónde advirtió de una tendencia de desaceleración en la economía nicaragüense, pues proyectó que ésta crecería apenas un 2.4 por ciento este año y en 2024 un 2.1 por ciento.
Se espera crecimiento aumente moderadamente
Por su parte, el Banco Mundial (BM) señala que si bien el PIB de Nicaragua experimentó un crecimiento del 3,8 % en 2022 "pese a la elevada inflación, los factores adversos globales y los daños causados por el huracán Julia", reconoce que "esta expansión se produjo gracias al fuerte consumo privado impulsado por las remesas y las exportaciones netas".
El BM estima que la economia de Nicaragua tenga un crecimiento de 3,1 % para este periodo influenciado por la desaceleración económica mundial y a la aplicación de políticas monetarias restrictivas.
"A partir de ahí, se espera que el crecimiento aumente moderadamente, activado por un incremento de las exportaciones a medida que las condiciones económicas mundiales mejoran y el país mantiene una postura firme en materia de remesas e inversión extranjera directa", dice.
En su publicación, el BCN asegura que, si bien continúan los riesgos generados por el entorno internacional asociados a la incertidumbre por los conflictos geopolíticos y condiciones financieras globales, la economía nacional ha logrado mantenerse a flote en este año pese a fluctuaciones cíclicas derivadas de dicho contexto.
Sigue mencionando que la inflación doméstica ha comenzado a reducirse de manera gradual, relacionada al descenso gradual de los precios internacionales y balance que se ha logrado en la política monetaria y fiscal.
“El BCN mantiene su rango de proyección de la inflación en 6.0 y 7.0 por ciento. En el caso del sector externo, se mantiene la proyección de un superávit de cuenta corriente de la balanza de pagos (entre 4.5 y 5.5% del PIB), sustentado en la evolución de los flujos externos, mientras que la proyección de acumulación de reservas internacionales se ha fortalecido”, señala.
Respecto al empleo, prevé que éste se mantenga estable, con una tasa de desempleo de entre 3.0 y 3.5 por ciento.
En cuanto a la Tasa de Referencia Monetaria (TRM), espera que se mantenga estable queda de este año, tomando en cuenta que “el nivel actual es suficiente para mantener consistencia con los objetivos de crecimiento y de estabilidad de la intermediación financiera”.
