Claves para manejar tus impuestos sin sorpresas este año
Este esfuerzo no solo evita sanciones, sino que también facilita el acceso a créditos y financiamiento.
Con el inicio del nuevo año fiscal, un experto en economía recomienda a las empresas organizar sus finanzas para cumplir con las obligaciones fiscales establecidas por la Ley de Concertación Tributaria. Este esfuerzo no solo evita sanciones, sino que también facilita el acceso a créditos y financiamiento.
Gerson Salgado, economista, subraya que uno de los principales errores al planificar los impuestos es el desconocimiento de los plazos legales y las condiciones de declaración.
"El incumplimiento de los tiempos puede resultar en multas significativas. Además, es crucial comprender qué ingresos o actividades están sujetos a impuestos según la ley", comenta.
El sector formal, que incluye a empresas con sistemas contables establecidos, enfrenta menores riesgos de incumplimiento, ya que su estructura financiera facilita el cumplimiento tributario. Sin embargo, Salgado destaca que las empresas del sector informal, a menudo sin contabilidad formal, pueden acogerse al régimen de cuota fija para cumplir con sus obligaciones fiscales de manera simplificada.
Para pequeñas empresas, mantener una contabilidad básica y al día es esencial. Esto no solo ayuda en el pago de impuestos, sino que también es un requisito común al solicitar financiamiento.
La importancia de planificar
"El sector financiero necesita verificar que los registros contables sean consistentes con las ventas, gastos y utilidades declaradas para otorgar créditos a tasas más competitivas", explica.
Aclara que, a corto plazo, no se esperan cambios en las leyes tributarias que afecten las declaraciones y pagos. Esto permite a las empresas prever sus obligaciones en función de la actividad económica del año anterior.
El no planificar adecuadamente puede resultar en desórdenes contables y sanciones legales. En sectores como el financiero, los bancos deben declarar y pagar impuestos sobre sus utilidades mensualmente, mientras que otras industrias lo hacen de manera anual. Este margen de tiempo debería aprovecharse para organizar las cuentas y evitar problemas al cierre del ejercicio fiscal.
La clave para evitar sorpresas desagradables, según Salgado, es mantener una contabilidad ordenada, independientemente del tamaño de la empresa. Esto no solo garantiza el cumplimiento tributario, sino que también facilita la expansión y mejora el acceso a créditos en condiciones favorables.
"Por muy mínima que sea la contabilidad, llevarla al día es fundamental para la sanidad financiera. Esto aplica tanto para pagar impuestos como para obtener financiamiento en mejores condiciones", concluye.
En resumen, la planificación fiscal no solo es un requisito legal, sino una herramienta estratégica para el crecimiento empresarial. Mantener una estructura contable adecuada y cumplir con los tiempos establecidos por la ley permite a las empresas operar de manera eficiente y evitar problemas financieros.