Emprendedores| Lidere a su equipo de trabajo
Las nuevas generaciones demandan líderes empresariales que en conjunto dirijan.
Establecer un ámbito de liderazgo y eliminar el sistema de jefatura es otro de los grandes retos que los emprendedores tenemos para posicionarnos en el mercado local y crecer con mayor rentabilidad.
Más allá de palabras bonitas, muchos emprendedores nacieron justamente porque estaban aburridos de la falta de empatía laboral, y las nuevas generaciones son más balanceadas en cuanto al ritmo de vida, una situación que con frecuencia choca cuando hay años de diferencia entre los propietarios y colaboradores.
Creer que su negocio es una finca, ordenar, gritar y hasta humillar, son escenas que como buenos nicaragüenses y emprendedores debemos eliminar de la mente y establecer una cultura de mejora continua, donde el objetivo del negocio debe estar claros para todos: rentabilidad y donde el buen uso del tiempo y recursos sean también una prioridad.
Antes de trabajar en el primer negocio de mi familia que fue un autolavado y luego Familys Pizza en Managua, recuerdo ser capacitado por facilitadores de EQUIP, una de las organizaciones del escritor y entrenador estadounidense, John Maxwell, muy reconocido en el ámbito empresarial a nivel mundial.
Tenía 17 años apenas y las lecciones eran un ideal que jamás imaginé poner en práctica en mi propio negocio y reconocer su importancia junto a ustedes.
El líder en su negocio, modela: es un facilitador nato que con su ejemplo y coherencia entre dichos y acciones te enseña cómo ser mejor cada día.
Este sería el dueño de negocio que inspira estar cerca de él o ella, que su presencia es grata y que es un imán para sus colaboradores. Aquel que plantea ideas y es abierto a retroalimentación, escucha activamente, y muestra con claridad los planes del negocio.
De pronto ustedes pensarán que esto es un mundo de fantasía laboral. La verdad es que no, este es el mundo de aquellos que nos abrimos paso con negocios que son fuertes, que a pesar de las dificultades crecen y se mantienen por años, y en los que sus propietarios son conscientes que ese es un ambiente propicio para todos.
El líder en su negocio, delega: consciente del potencial asignado en las tareas de las personas en su alrededor, sabe asignar tareas acordes al potencial de la persona, con metas justas o le indica con claridad cómo lograrlo. O bien, le anima para que lo alcance.
Un negocio para su mejor desempeño necesita crecer de la mano de personas que gusten de sus asignaciones porque para lograr algo mayor, el propietario debe enfocarse en su especialidad. Esto quiere decir: zapatero a su zapato.
Si como dueño soy mejor en ventas, atención o alguna área en específica, pues dedicaré mayor porcentaje del tiempo a la actividad en la que mejor soy, sin descuidar las que asigné a otros en las que ellos son mejores.
Por mencionar un ejemplo, entre mis amigos emprendedores he encontrado buenas experiencias y otras frustrantes, de aquellos que si les gusta lo que hacen y decidieron enfocarse en su potencial. Mi principal proveedora de uniformes confeccionados, me dice que su mayor talento está en la confección y acabado de prendas de vestir, pero lo administrativo le era un reto que por muchos años asumió con un poco de cansancio.
Y si de mercadeo o publicidad hablabamos, era su tope. Con los años entendió que era mejor que se enfocara en lo que a ella más le gustaba y delegara un porcentaje mayor de tareas administrativas y de mercadeo.
Como líder esta amiga, no descuida el negocio, porque debe monitorear cada área, pero si potencializa la asignación y la formación de cada persona en su equipo.
El líder en su negocio, inspira: no es una forma de ser cursis, pero sí de entender la responsabilidad por muy pequeño que sea el inicio de mi emprendimiento, ya que somos objetos de muchas miradas por nuestros colaboradores o proveedores, y nuestra actitud y óptica de vida marcarán la diferencia.
Con frecuencia el mercado laboral se renueva y según el Foro Económico Mundial, las nuevas generaciones nacidas posteriores al 2000 son más dependientes del balance entre sus vidas y metas, envejecer en un empleo no es su sueño y entenderles es importante para que la relación ganar/ganar sea equitativa.
“Cada jugador tiene un lugar donde dar lo mejor de sí”, explica John Maxwell en su teoría Ley de la Especialización del libro: Las 17 Leyes incuestionables del trabajo en equipo.
Yohany López
Licenciado en Comunicación Social y Emprendedor
jonysalme@gmail.com
Instagram: salmeron_yohany