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Gloriángeles Darce, campeona internacional de microblading Worlds USA
La propietaria de Estudio Toque de Ángel, rememora sus inicios y logros a lo largo de su trayectoria.
A pesar de haber viajado por muchos países del mundo capacitándose en todo lo que tiene que ver con el medio del maquillaje, Gloriángeles Darce Hernández, quien se convirtió recientemente en campeona internacional de microblading Worlds USA, no olvida sus inicios.
La experta en belleza viajó el pasado 09 de agosto a la ciudad de Orlando, Florida, para participar en una competencia de micropigmentadores a nivel mundial que llevó por nombre Worlds USA y que se realizó el 10 de agosto.
“Era un congreso que tuvo lugar el día 11 y 12, fueron tres días intensivos. El evento Worlds USA es una firma internacional donde podíamos ir cualquier micropigmentador del mundo a aprender, pero también a mí me dio esa espinita de poder competir”, cuenta a este medio de comunicación.
Añade que más que Gloriángeles y más que Toque de Ángel, en los congresos es Nicaragua. "En la competencia como tal sé que había dos venezolanas, una dominicana y yo, solamente cuatro latinas y de ahí estaban otras participantes europeas”, dice Darce Hernández de 41 años y quien es oriunda de Chinandega.
Sobre la certificación
Al consultarle qué significa haber ganado esta certificación, Darce Hernández confiesa que significa, “mucho regocijo, mucha gratitud, pero sobre todo una responsabilidad, porque ganar un título como este, no es solamente que ya ganaste y ya, ahora viene lo que se tiene qué hacer, por ejemplo al ser Nicaragua como país este año me toca seguir trabajando más, puliendo la técnica, presentar una técnica el otro año, para ser también speaker, que es la posibilidad que se gana con este título de ser speaker internacional...”.
Sus inicios
Aclara que con su trabajo se dedica a potenciar lo que es el amor propio de la mujer a través de tratamientos estéticos. A través de su estudio ofrece todos los servicios de micropigmentación en cejas.
Así como las diferentes técnicas en cejas, ojos y labios, también ofrecen todos los servicios en maquillajes profesionales, clases de maquillador profesional, en su estudio, que ya tiene 17 años operando como marca, diez años en físico, el mismo tiempo que lleva como micropigmentista.
“Comencé a domicilio, yendo a los hoteles, a las casas de las clientas, eventualmente atendía en mi casa, pero ya formalmente con un local hasta hace diez años, Dios me dio esa bendición de ya tenerlo y actualmente estoy atendiendo a las clientas, pero ahora ya con un formato más privado porque otra vez volví a un formato que no estoy tan público, pero si estoy siempre atendiendo de forma privada personalizada que eso es algo que a las clientas les ha gustado”, menciona.
Así mismo, manifiesta que su formato ha sido personalizado, no masivo, "la única persona que atiende por ahora soy yo, eso me obliga a tener una agenda programada para que las clientas no lleguen a esperar ni perder tiempo”, dice.
Su incursión y proyecto social
Al preguntarle que la llevó a entrar al mundo de la belleza, comenta que tiene una tía que es estilista y fue quien la inspiró, sumado a ello su abuelita, quien ya falleció, quien era costurera.
“Cuando yo era niña me sentaba a ver los figurines, las revistas donde estaban las hechuras de los vestidos, entonces yo siempre tenía claro que quería trabajar en moda, me gustaba ver por horas los vestidos, las mujeres bien elegantes, me fascinaba; sin embargo, ya después que empecé a trabajar inicialmente en ventas, decidí estudiar estilismo", refiere.
Fue el estilismo que la llevó a estudiar maquillaje profesional. "Una vez que maquillaba a mis clientas y les maquillaba las cejas, las cejas eran como las que más les encaban, entonces me decían, tenés que aprender a hacer esto como un tatuaje, pero no me gustaba el tatuaje, con el tiempo, después salió la micropigmentación, decidí hacerlo porque es un tratamiento temporal y al final haciendo este arte y poniendo este don al servicio de los demás también ayudo a personas”, revela.
Darce Hernández tiene un programa social con la Fundación Ortíz Gurdián donde le regresa las cejas a las personas sobrevivientes de cáncer.
“Es algo que a mí me llena el alma, entonces al final me doy cuenta que no es solo vanidad, cuando maquillo a una mujer, cuando hago un tratamiento de micropigmentación y ella se ve al espejo, es el brillo del alma, es eso que no tiene precio, que vos lo vés y decís como cambió sus facciones, su espíritu, su energía, sale caminando distinto esa mujer y eso no cambiaría por nada”, apunta.
La maquillista profesional asegura que ella se ha propuesto capacitarse constantemente, por lo que ha viajado a países de distintas partes del mundo, finaliza.
