OPS y Cepal piden a Latinoamérica reactivar la economía hasta controlar la pandemia

América Latina no pueden considerar ahora la reactivación de sus economías sin antes haber controlado la pandemia del coronavirus afirman la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) a través del informe denominado “Salud y economía: Una convergencia necesaria para enfrentar el Covid-19 y retomar la senda hacia el desarrollo sostenible en América Latina”.

Datos de la OPS revelaron más de 149 mil nuevos casos de Covid-19 diagnosticados en promedio en América Latina durante la última semana, cifras que debe ser tomada en cuenta por los países antes de ordenar una reapertura.

“No hay reapertura económica posible sin que la curva de contagios haya sido controlada, y no hay reactivación posible sin un plan claro que evite el repunte de los contagios, a partir del testeo, trazabilidad y confinamiento”, apuntó Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal.

Por su parte, la directora de la OPS, Carissa F. Etienne dijo que "a medida que avanzamos rápidamente, vemos una situación estructuralmente diferente, a la fecha la región ha notificado prácticamente 9 millones de casos de la Covid-19, prácticamente la mitad de ellos en América Latina y 350,000 muertes. El contagio sigue acelerándose en la región”.

En este sentido, la OPS y la OMS han recordado a los países a tomar en cuenta que sólo una población sana puede mover la economía y aportar a ésta.

Las organizaciones además señalaron que la pandemia vino desnudar y agravar serios problemas estructurales entre salud y economía que ya padecía esta región del mundo.

“Las Américas son vulnerables a perder años de ganancias en el ámbito de la salud en simplemente unos meses. Esto es una tragedia, nos enfrentamos a un desafío sin precedentes, que exige de sistemas de salud con buen financiamiento sólido para que nos ayuden así a superar la crisis y a recuperarnos”, dijo Etienne.

Para esto según la titular de la OPS se requiere garantizar inversiones sostenidas e importantes para que los países puedan controlar la pandemia, proteger las ganancias en el ámbito de la salud, dar respuesta a la pobreza creciente y a las desigualdades en la región.

Por su parte, Bárcena, manifestó que el Covid-19 ha resultado en la mayor crisis económica y social y ha revelado serios problemas estructurales del modelo de desarrollo de la región latinoamericana, que actualmente es el epicentro de la pandemia.

Bárcena enfatizó que debido al alto grado de urbanización, se han potenciado los contagios ya que en cada país, más de un tercio de la población vive en ciudades con más de un millón de habitantes y con altos índices de hacinamiento.

A esto se le suma que hay una alta informalidad laboral, frágiles sistemas de protección social, y tensiones políticas y sociales que han exacerbado los efectos económicos y sociales de la pandemia.