OEA pide a países miembros proteger a la población ante la trata de personas
Según la OEA la trata de personas podría aumentar ante la pandemia del coronavirus
Los grupos de personas considerados de riesgo y de mayor vulnerabilidad ahora están más expuestos a ser víctimas de la trata de personas debido a los desafíos crecientes en el contexto de la pandemia, según la Organización de Estados Americanos (OEA), organización que recomendó a los países a redoblar esfuerzos para prevenir y sancionar este flagelo en las Américas.
Hasta 2018, las ganancias ilícitas que obtuvo la industria de la esclavitud o trabajo forzado alcanzaron los 150 mil millones de dólares anuales se acuerdo a datos del Proyecto Polaris.
Datos de Naciones Unidas (ONU), revelan que las mujeres y las niñas representan más de 70% de las víctimas de este delito y “se encuentran entre las más afectadas en la pandemia”, aseguró recientemente Luis Cordero, presidente de la OEA.
“Actualmente en el marco de la conmemoración mundial contra la trata de personas se advierte más que nunca la necesidad de redoblar esfuerzos en cumplimiento de los compromisos asumidos para garantizar la protección de las víctimas de la trata de personas y de prevenir este delito a través de la cooperación internacional y la implementación de políticas públicas integrales”, agregó Almagro.
El pasado viernes, la Secretaría de Seguridad Multidimensional de la OEA presentó un informe para dar detalle del trabajo que ha realizado esa organización en los últimos años a través del Departamento de Seguridad Pública y del Departamento Contra la Delincuencia Organizada Trasnacional en materia de prevención y combate a la trata de personas, así como la asistencia y protección a las víctimas de este delito.
Farah Urrutia, secretaria de seguridad multidimensional de la OEA, consideró como avance en la lucha contra la trata de personas que esta organización actualmente forme parte del Grupo Interinstitucional de Coordinación Contra la Trata de Personas de la ONU.
A la fecha, esta secretaria en el ámbito político se ha planteado desde 2015 al 2020 el II Plan de Trabajo para Combatir la Trata de Personas en el hemisferio Occidental.
“El plan es un instrumento no vinculante, de aplicación regional, con lineamientos específicos de las áreas de prevención, protección, persecución y transversales en las áreas de cooperación e intercambio de información”, afirmó Urrutia.
Esto permitió también la publicación del Primer informe de Progreso sobre la implementación de dicho plan en el que participaron 33 de los 34 Estados miembros de la OEA.
En los últimos 5 años, a través del Departamento de Seguridad Pública, se han desarrollado 4 grandes proyectos que involucrado la participación de 9 países, entre ellos, Nicaragua.
Como parte de estos proyectos se han elaborado 8 diagnósticos nacionales, así como manuales para la investigación de los delitos de trata de personas y tráfico ilegal de migrantes, se han capacitado a más de 1,200 funcionarios públicos, 230 operadores de justicia.
También se desarrolló e implementó el Sistema de Información Sobre Delitos que Afectan a las Personas Migrantes e Situación Irregular (SIDMI) y se ha logrado una articulación con autoridades del poder público y la sociedad.