Al menos diez muertos y decenas de atrapados por un alud de tierra en la India
El deslizamiento ocurrió en plena noche en el distrito de Raigad.
Al menos diez personas murieron y decenas continúan atrapadas después de que un deslizamiento de tierra arrasase una aldea en el oeste de la India, mientras los equipos de rescate trabajan contra reloj para recuperar a posibles víctimas.
"La administración está tratando de superar todos los obstáculos y está realizando las operaciones de rescate con toda su capacidad. Hasta el momento se han encontrado diez cuerpos sin vida", informó en Twitter el jefe adjunto de Gobierno del estado occidental de Maharashtra, Devendra Fadnavis.
El deslizamiento ocurrió en plena noche en el distrito de Raigad, que sufrió al igual que el resto de la región intensas lluvias en los últimos días que están dificultando las operaciones de rescate.
Hasta el lugar se han trasladado varios cuerpos de la Fuerza Nacional de Respuesta a Desastres (NDRF), que tras las dificultades iniciales por las precipitaciones y la oscuridad han podido acelerar las labores de retirada de los escombros.
La aldea, situada en una región montañosa, constaba de al menos 225 residentes de los cuales las autoridades han podido rescatar a más de 80, informó Fadnavis en el Parlamento regional.
Al menos cien personas continúan atrapadas bajo los escombros, según medios locales, mientras más de 60 efectivos del NDRF y 500 operarios continúan con las labores de rescate.
"Se han desplegado dos helicópteros de la Fuerza Aérea. Sin embargo, debido al mal tiempo, el vuelo no se puede realizar". agregó Fadnavis.
El jefe de Gobierno regional, Eknath Shinde, se trasladó esta mañana al lugar del accidente, repleto de escombros y árboles completamente arrancados y donde tan solo se observan unas pocas casas en pie, según videos difundidos en redes sociales.
Según Shinde, todavía era difícil detallar la cifra exacta de personas que continúan atrapadas, que inicialmente llegó a superar el centenar de personas.
Además indicó que las lluvias complicaron la llegada de los primeros vehículos por carretera por lo que la mayoría de los rescatistas tuvieron que subir a pie a esta zona de difícil acceso.