El FBI coordina en Ecuador apoyo a investigación por asesinato de Fernando Villavicencio
El FBI fue solicitado en la investigación por el propio presidente ecuatoriano.
Una comisión del Buró Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos llegó a Ecuador para coordinar el apoyo a las indagaciones en torno al asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio, ultimado por sicarios el pasado miércoles tras encabezar un mitin político en Quito.
Así lo dio a conocer el ministro del Interior, Juan Zapata, en una rueda de prensa en la que dio detalles de los avances de la investigación sobre el asesinato del candidato, uno de los ocho que se habían inscrito para los comicios del próximo domingo 20 de agosto.
La comisión del FBI "ha tomado contacto con la Policía" nacional y en las próximas horas se celebrará una reunión "tripartita" con la Fiscalía General del Estado, que es la titular de la instrucción en el caso, apuntó Zapata.
El ministro agregó que en ese encuentro se determinará "el ámbito de la colaboración y apoyo" que dará el FBI en la investigación del crimen, cuya participación fue solicitada por el propio presidente ecuatoriano, el conservador Guillermo Lasso.
Zapata adelantó que, si así lo definiera la Fiscalía, el FBI podría apoyar en la "explotación" o extracción de la información contenida en varios teléfonos móviles decomisados durante las primeras acciones policiales tras el tiroteo contra el candidato presidencial.
EN COMUNICACIÓN CON COLOMBIA
El ministro tampoco descartó que se pueda solicitar colaboración a otros organismos extranjeros, como la Policía colombiana, ya que los seis sospechosos detenidos por el crimen son de esa nacionalidad.
De hecho, las autoridades colombianas han entregado a la ecuatoriana información relacionada con los seis detenidos, así como sobre de otro sujeto de esa nacionalidad que resultó muerto tras el tiroteo y que es acusado de ejecutar los disparos contra Villavicencio.
"Nunca se descarta una colaboración internacional" y más aún con Colombia, con la que se tiene una estrecha cooperación por compartir frontera, añadió Zapata.
Al respecto, el comandante general de la Policía, Fausto Salinas, que acompañó a Zapata en la rueda de prensa, recordó que tras el crimen de Villavicencio, al terminar la tarde del pasado miércoles, se coordinó con las autoridades vecinas para que alertaran del eventual paso de alguna persona sospechosa desde Ecuador.
ANTECEDENTES DE SOSPECHOSOS
Asimismo, dijo que, en coordinación con la Interpol de Colombia, se logró obtener las fichas de antecedentes de los sospechosos detenidos.
Zapata y Salinas, que acudieron a la rueda de prensa acompañados de otros altos oficiales de la Policía, remarcaron que la información que proporcionan es la que se puede tomar de manera oficial, ello porque, según dijeron, han circulado en redes sociales noticias falsas sobre el caso.
Tampoco quisieron comentar sobre hipótesis, análisis de expertos ni las dudas que han surgido sobre el asesinato de Villavicencio, ocurrido cuando disponía de una protección policial especial.
Lo que sí destacó Zapata es la "rapidez" con la que actuó la Policía para detener a los sospechosos materiales del crimen y levantar los indicios que llevaron a que la Justicia ordenara la prisión preventiva de ellos.
EN BUSCA DE AUTORES INTELECTUALES
El ministro dijo que el primer paso ha sido dado, con la detención de los sospechosos materiales del crimen, pero dijo que el compromiso es dar con los autores intelectuales u otros que puedan aparecer en la indagación.
La llegada de una misión del FBI a Ecuador, por pedido del presidente Lasso, se concretó el mismo día del ataque armado, cuando el embajador de Estados Unidos en Ecuador, Michael J. Fitzpatrick, ofreciera una "asistencia investigativa urgente".
Desde hace algo más de dos años se han incrementado en Ecuador los asesinatos a manos de sicarios y las matanzas a cargo de grupos de la delincuencia organizada, que el Gobierno vincula con bandas internacionales del narcotráfico.
Las elecciones extraordinarias del próximo domingo fueron convocadas luego de que Lasso decretara en mayo pasado la llamada "muerte cruzada", un mecanismo constitucional con el que disolvió la Asamblea Nacional (Parlamento), de mayoría opositora, cuando se disponía a votar su destitución.