El Salvador niega prácticas inhumanas en cárceles bajo régimen de excepción
La canciller salvadoreña sostuvo que el país cumple con todos los estándares internacionales de privación de libertad.
El Gobierno de El Salvador rechazó en una audiencia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) las acusaciones de torturas en las prisiones del país bajo el régimen de excepción, vigente desde marzo de 2022.
El comisionado Carlos Bernal mencionó en dicha audiencia que hay informes de organizaciones humanitarias sobre "personas torturadas y fallecidas en las cárceles", lo cual calificó de "muy preocupante".
Andrés Guzmán, comisionado presidencial de Derechos Humanos y Libertad de Expresión, negó estas prácticas en las cárceles salvadoreñas. "En El Salvador no hay torturas ni asesinatos en los centros penales. No son campos de concentración ni se libra una lucha política", afirmó.
Añadió que estas aseveraciones son "totalmente falsas", mientras que la canciller salvadoreña sostuvo que el país cumple con todos los estándares internacionales de privación de libertad. Además, tachó de "infundadas" las acusaciones de violaciones de derechos humanos hechas por las organizaciones humanitarias. "El Salvador no es, ni será bajo la actual administración, un Estado autoritario y represivo", enfatizó.
La audiencia virtual se llevó a cabo a solicitud de diversas organizaciones humanitarias durante el 190 período de sesiones del organismo regional. Según datos del Socorro Jurídico Humanitario (SJH), más de 300 personas han fallecido bajo custodia estatal desde marzo de 2022, muchas mostrando signos de violencia.
En este contexto, las autoridades informan de más de 80.100 detenciones, mientras que las organizaciones han recibido más de 6.000 denuncias de abusos a los derechos humanos, principalmente por detenciones arbitrarias.
Un informe reciente de Cristosal revela que más de 170 menores quedaron huérfanos tras la muerte de sus padres en las cárceles de El Salvador en el marco del régimen de excepción.