Referencial

Referencial

Jardines de lluvia: la solución para reducir inundaciones

Además de embellecer estas áreas ajardinadas, ligeramente hundidas, recolectan y absorben agua de escorrentía.


La conservación del agua es fundamental cuando se trata de los jardines de lluvia, ya que se presentan como una solución eficiente para reducir las inundaciones locales.

Además de embellecer estas áreas ajardinadas, ligeramente hundidas, recolectan y absorben agua de escorrentía, permitiendo infiltrarla por el nivel del suelo durante las precipitaciones.

En temporada lluviosa puedes aprovechar los recursos que la naturaleza te brinda, recolectando agua como una medida de auto riego para tus plantas. “Los períodos de lluvia intensa son la oportunidad para sostener por más tiempo la humedad”.

Los jardines de lluvia también disminuyen los contaminantes como aceites, pesticidas y otros químicos que predominan en el medio ambiente y que en general en los sistemas municipales que requieren grandes cantidades de energía.

Cabe destacar que los jardines de lluvia son un refugio para plantas nativas y resistentes a la humedad, que a su vez atraen a polinizadores como abejas, mariposas y aves, creando un ecosistema saludable y vibrante.

Este sistema pluvial tan enriquecedor puede implementarse por medio de un práctico procedimiento:

1. Identificá un área dentro de tu propiedad donde se acumule agua de lluvia, como la base de una bajante de agua del techo o una pendiente natural. Conociendo la distancia adecuada de los cimientos de la casa para evitar daños por filtraciones internas

2. Creá una depresión en el terreno de entre 10 y 30 cm de profundidad, dependiendo del tamaño del área y la cantidad de agua que deseas recolectar. Ya que permitirá que el agua se acumule y se distribuya por todo el suelo.

3. Añadí compost o arena para mejorar la capacidad de drenaje del suelo, permitiendo una infiltración más eficiente de la captación del agua de lluvia. Evita suelos compactados o arcillosos que podrían causar encharcamiento.

4. Trasplantá ornamentación resistente a la humedad que puedan adaptarse tanto a condiciones húmedas como secas. Algunas opciones comunes son lirios, helechos, dracaenas y juncos.

5. Aplicá una capa de mulch orgánico (corteza de árbol o paja) para ayudar a retener la humedad, reducir la evaporación y proteger las raíces de las plantas.

Un jardín de lluvia es ideal para ahorrar el uso de agua potable en el riego de áreas verdes. Previene inundaciones y apoyan la biodiversidad local, lo cual es una inversión a largo plazo que puede hacer una gran diferencia en la calidad del ecosistema de tu hogar o comunidad.

Arq. Débora Michelle Mendoza Peralta

Creadora de Destudio – Tienda de Decoración

Coaching en Interiorismo

➤ Suscríbete a nuestro canal de YouTube