![EFE](/media/news/fad58f7c62962a06b4ce1d453d7a5aa364b890d9miniw-0e5a67.jpg)
EFE
20 años de Google Maps, de jubilar a los GPS a ser clave para una investigación policial
Llega a dos décadas con el logro de haber alcanzado 2.000 millones de usuarios mensuales.
Google Maps cumple este sábado 20 años con el logro de haber alcanzado 2.000 millones de usuarios mensuales, haber capturado casi cada centímetro del globo y haber jubilado en sus dos décadas de vida los mapas de carreteras, los dispositivos GPS y los anuarios de páginas amarillas.
El mapa digital también ha sido el protagonista de curiosas historias como que una imagen de Google Maps en la que aparece un hombre metiendo en su coche lo que podrían ser los restos de un cadáver haya terminado siendo una de las pistas que han servido a los investigadores para esclarecer la desaparición y muerte de un hombre en Soria, España.
O que Google Maps se enfrentase a una demanda por haber proporcionado indicaciones erróneas a una persona que murió una noche tras caer de un puente medio derruido al que este sistema de navegación le había dirigido.
Un mapa del mundo en 360°
El 8 de febrero de 2005, Google Maps se lanzó por primera vez para la web como una nueva solución para ayudar a las personas a "llegar del punto A al punto B", según el relato de la empresa.
En 2004, el cofundador de Google, Larry Page, tuvo la idea de crear un mapa del mundo en 360°.
"Larry recorrió algunas calles con una cámara de video y se la entregó a alguien y le dijo: ‘Oye, ¿qué puedes hacer con esto?’", dijo a CNBC Maria Biggs, gerente de programas técnicos de Google Street View, una característica destacada de Google Maps.
Cámaras hasta en las jorobas de los camellos
Las cámaras de Street View ahora son una parte clave de cómo Google recopila datos para sus mapas. La empresa no solo utiliza coches con cámaras, sino también bicicletas, cámaras submarinas para captar el arrecife de coral australiano Gran Barrera de Coral o camellos para mapear el desierto de Liwa de Emiratos Árabes Unidos.
Pese a que las cámaras de Street View son una parte importante de cómo Google recopila datos para Maps, la aplicación también se basa en imágenes satelitales y aéreas, e información de más de mil fuentes proporcionadas por terceros, como gobiernos locales y usuarios.
La popularidad de Google creció exponencialmente cuando pasó de la pantalla del PC a los teléfonos inteligentes. En 2007, Google lanzó la versión 2.0 de Google Maps para dispositivos móviles, como Blackberry. Un año después llegó la primera aplicación para Android y no fue hasta 2012 que llegó la aplicación para iOS.
En 2013, el gigante de internet Google cerró un acuerdo para la compra por 1.150 millones de dólares de Waze, una popular aplicación de tráfico rodado y navegación para dispositivos móviles que contaba con una activa plataforma socia y que permitía observar en tiempo real el tránsito en las ciudades y elegir las distintas alternativas ante los embotellamientos.
"Vamos a trabajar de cerca con la vibrante comunidad de Waze, que es el ADN de esta aplicación, para asegurarnos de que tienen lo que necesitan para crecer y prosperar", dijo entonces Brian McClendon, vicepresidente de ingeniería de la empresa.
IA en los mapas
Los últimos cambios de Google Maps han sido para integrar la inteligencia artificial (IA) de Google, Gemini, para que los usuarios de Estados Unidos puedan "hablar" con Google Maps y pedirle recomendaciones o hacer preguntas sobre un destino.
La directora de Google Maps, Miriam Daniel, explicó en el lanzamiento que la aplicación de mapas ahora puede hacer recomendaciones ante preguntas como "cosas para hacer con amigos por la noche" en una determinada área y que, además, es capaz de responder a preguntas específicas que se hagan sobre un local de ocio, como si dispone de un patio o preguntas sobre su menú.
Los vaivenes políticos también han afectado a la aplicación, como pasó este enero con el cambio del nombre del Golfo de México a Golfo de América en el Google Maps en EE.UU., después de una orden ejecutiva del presidente Donald Trump.