Nicaragüenses protestan luego de Viacrusis Penitencial

Un mar de fieles católicos inundó la carretera hacia Masaya en el Viacrucis Penitencial del viernes santo, encabezado por la imagen de la sangre de Cristo, catalogada como milagrosa; así lo atestiguan cientos de promesantes que participan con los ojos vendados, los pies descalzos, rezando el rosario o repartiendo alimentos, agradecen su intercesión por los múltiples favores recibidos.

"Ya son 15 años de participar en la procesión de la sangre de Cristo. Ella me ha levantado de la cama de varias enfermedades y para mí la fe es lo grande que Dios me regala, afirmó Rosa Aura Ortiz, devota a la imagen de la sangre de Cristo.

Sobre esta actividad, el cardenal Leopoldo José Brenes manifestó que "venimos de manera humilde pidiendo al señor Jesús el perdón de nuestras culpas y nos dé esa paz interior que tanto necesitamos. Es un momento de contemplar a Jesús crucificado y saber que la resurrección en nuestra vida está próxima y en nuestra nación también".

El cardenal Brenes, Arzobispo Metropolitano de Managua, pidió a los participantes ofrecer este Viacrucis para que la fraternidad se contagie en el mundo y que por el poder de la Cruz de Cristo vuelva la paz a Nicaragua, que se perdió desde abril del año pasado.

Durante esta manifestación de fe, algunos fieles católicos rogaron por el retorno de la paz en Nicaragua, la libertad de unos 232 presos políticos y justicia material y divina para los más de 325 fallecidos a causa del estallido social en el país, que trajo consigo represión para quienes se manifestaban en contra del actual Gobierno del presidente Daniel Ortega.

"Hoy venimos a pedir por todos los presos políticos, para que pronto obtengan su libertad, no sólo ellos sino toda Nicaragua, que puedan pronto estar con sus familias más en este tiempo de Semana Santa. Ya nos han robado todo menos la fe y la esperanza", comentó una joven que cargaba con la bandera de Nicaragua en su espalda.

Otra feligrés señaló que "hoy le pedimos al Señor que nos haga justicia por todos nuestros fallecidos, él lo puede hacer, porque no hay nada imposible para él. Ninguna maldad lo va a vencer".

Al final del recorrido y al ingresar la imagen a la Catedral de Managua, el cardenal Brenes rogó por las almas de los fallecidos a causa de la represión estatal, lo que desencadenó que decenas de feligreses que se manifestaron en contra del Gobierno de Nicaragua, fueran reprimidos por agentes de Policía que rodearon el templo.

Este hecho dejó como saldo a una mujer asfixiada por los gases lacrimógenos, pero minutos después fue atendida por paramédicos y está fuera de peligro.

Minutos después de este ataque de la Policía Nacional, esta institución emitió un comunicado acusando a los manifestantes de manipular el Viacrucis este viernes santo.

"Mientras en todo el país se realizaron en tranquilidad y recogimiento Espiritual, Cultos, Misas, Viacrucis, Procesiones, en Managua, un grupo de personas encapuchadas, armadas con piedras, morteros y algunas con armas de fuego, quiso manipular el Viacrucis de la Catedral", afirmó la Policía Nacional en su comunidado.

La institución policial catálogo de daño las frases escritas en la la Fuente de la Rotonda Rubén Darío, en la que piden libertad y justicia para los fallecidos y presos políticos, además de la salida del actual presidente Daniel Ortega y la vicemandataria Rosario Murillo.