Mapa de pueblos indígenas, áreas protegidas y ecosistemas de Nicaragua / Cortesía
Piden mayor apoyo a los pueblos indígenas de Nicaragua
Diputado denuncia que en las comunidades indígenas sigue avanzando la presencia de colonos
Ante la crítica situación que enfrentan las comunidades indígenas de Nicaragua, organizaciones no gubernamentales y ambientalistas llaman a las autoridades nicaragüenses a mostrar su interés en la protección de estos pueblos.
Brooklyn Rivera, diputado por partido Yatama en la Asamblea Nacional, denunció que la invasión de tierras, la tala de bosques y el despojo de sus tierras por parte de los colonos, pone cada vez más en peligro a las comunidades indígenas, las cuales representan la identidad cultural del país.
El diputado Brooklyn Rivera denunció que actualmente en las comunidades indígenas sigue avanzando la presencia de colonos armados ya que es “una política del Estado”, para “ir apropiándose de todas las tierras, saquear los recursos naturales y luego pasar todas las propiedades a estos colonos”.
Diversos estudios a nivel mundial han confirmado que las comunidades indígenas son las que más conservan los bosques.
“Técnicamente las comunidades indígenas son guardianes por convivir en armonía con los ecosistemas”, expresó Joel Bermúdez, miembro del equipo de educación ambiental del club de Jóvenes Ambientalista.
Bermúdez además resaltó que los miembros de este movimiento apuestan al fortalecimiento de capacidades de las comunidades indígenas en su organización, en la creación de monitoreo y vigilancia, para que ellos tengan mayor seguridad de cómo presentar denuncias ambientales.
Los Jóvenes Ambientalistas solicitan a las comunidades locales y organizaciones a tomar mayor iniciativas para la protección de estas comunidades.
“Instamos a las autoridades nacionales a la aplicación y el cumplimiento efectivo del marco jurídico en lo que corresponde a delitos ambientales”, resaltó Bermúdez.
La grave situación que enfrentan las comunidades aborígenes de Nicaragua ha sido fuertemente denunciada por Fundación del Río, ONG a la que despojaron de su personería jurídica en diciembre de 2018, pero que sigue denunciando los problemas ambientales en el país.
