Año lectivo 2020 culminó con retroceso en calidad de la educación, dice organización

El año lectivo 2020 culminó con un significativo retroceso en la calidad de la educación en las escuelas públicas del país estimulado por el contexto de la pandemia del Covid-19 y la crisis sociopolítica que vive Nicaragua desde 2018, según el Foro Educación y Desarrollo Humano (FEDH).

Jorge Mendoza, director de esta organización, mencionó que a pesar que si bien la ausencia de buena parte de los estudiantes durante la oleada más álgida de la pandemia en Nicaragua obedeció a una medida de autoconfinamiento, esto incidió de manera directa en la calidad del aprendizaje de los estudiantes en la educación básica y media.

Desde que inició la crisis sanitaria por el Covid-19, el Ministerio de Educación (Mined) nunca suspendió las clases presenciales en las escuelas y aquellos medios alternativos aplicados por el gobierno para la enseñanza remota como las teleclases no alcanzaron la eficacia esperada, indicó Mendoza.

“Lo cerramos (el 2020) con promociones automáticas, lo cerramos sin haber concluido todos los contenidos del currículum y de los planes programáticos de enseñanza en todos los niveles. Un año en el que se afectó significativamente la presencia de los niños en la escuela a pesar que el Ministerio de Educación nunca llamó a suspender las clases, muchas familias decidieron para proteger la vida y la salud de sus hijos y la de ellos mismos también, no enviar a los niños a clases”, expresó.

Para Mendoza, el uso de la tecnología en este contexto era vital para garantizar la enseñanza de los contenidos de forma remota, pero la pandemia desnudó la falta de capacidad del Mined y de competencia de casi 54,000 docentes del sistema de educación público en el país en el uso de estas herramientas tecnológicas.

Enfatizó que los docentes de las escuelas púbicas “no tienen todavía las competencias para realizar de manera efectiva una educación a distancia”.

Con la llegada del nuevo ciclo escolar 2021, esta y otras debilidades del actual modelo educativo en Nicaragua que se hicieron más evidentes con la pandemia, como la falta de condiciones para garantizar un sistema educación en línea, será un reto permanente mientras la crisis sanitaria no sea controlada

A eso se le suma que sólo entre el 15 y 18 por ciento de las escuelas públicas de todo el país tienen conexión internet y solo el 30 por ciento de los hogares cuenta con este servicio.

En términos presupuestarios, para 2021 el Mined seguirá experimentando una marcada disminución en su partida anual asignada, pues se le redujo 410 millones de córdobas con la reciente reforma al Presupuesto General de la República.

Al respecto, Mendoza comentó que “a pesar del llamado de distintas organizaciones, de especialistas, del llamado inclusive internacional que dice que deberíamos invertir por lo menos un 4 o un 6 por ciento del Producto Interno Bruto, en Nicaragua, en términos constantes y sonantes en todos los años hay una reducción al presupuesto nacional dedicado al tema de la educación”.

Para 2021 hay mucha incertidumbre por la expectativa del comportamiento de la pandemia y la agudización de la represión gubernamental en el contexto de las elecciones presidenciales, según la FEDH.