Mujer al volante: Leyla Blandón, ha sido taxista por 17 años
Recorre las diferentes calles de Managua en su taxi, ejerciendo esta labor ha sacado adelante a sus hijos.
Desde hace 17 años, Leyla Blandón Guido, es una trabajadora del volante. Ha aprendido a disfrutar la carretera, el tráfico vehicular y el tiempo que pasa en su taxi subiendo y bajando clientes. Esta mujer, se siente orgullososa de haber roto estereotipos y conseguir el pan de cada día, con un trabajo que para muchos es solo "para varones".
Con esta labor que desarrolla en las calles y carreteras de Managua, ha logrado sacar adelante a sus cuatro hijos, quienes ahora son mayores de edad, confiesa que lo que más ama en la vida es conducir.
Blandón recuerda que la concesión de su taxi la tiene desde hace 22 años, antes era su esposo quien lo manejaba, pero un día decidió dejarlo por el cansancio, fue entonces, que en vez de contratar un cadete, decidió aprender a manejarlo ella.
“Recuerdo que yo era ama de casa, tenía la concesión, pero uno de mis hijos al ver que ya mi esposo no continuaría con su labor me dijo -aprenda mamá, vos podes taxiar-, en 15 días aprendí y me fui a rodar por Managua, empecé joven a los 36 años, ahora es un trabajo que me tiene fascinada”, dijo Blandón.
La taxista aseguró que a la mayoría de sus pasajeros les agrada la precaución con la que maneja, que incluso supera a la de sus colegas varones.
La mayoría de sus clientes son mujeres y personas de la tercera edad, quienes confirman sentirse seguros y seguras con ella, por eso le llaman constantemente para poder movilizarse por la capital.
“Son más los varones que se sienten admirados, porque me dicen que se sienten más seguros viajando conmigo, y pues ya con 17 años de experiencia tengo clientes desde hace años y tengo mi agenda, personas de la tercera edad, me encanta andar con viejitas platicamos, nos divertimos y ahí le ando haciendo sus diligencias, siempre trato de dar el mejor servicio”, indicó.
Según la taxista, de 53 años de edad, la inseguridad afecta a todos los obreros del volante, pero afirma que nunca ha sido víctima de ningún asalto u alguna agresión física.
“Dos tipos se me montaron un día por la noche, hace varios años y recuerdo que me confesaron, ´señora le íbamos a robar, pero usted me recordó a mi madre, es que ella siempre ha sido una mujer luchadora, déjeme por aquí´, claro que aproveche el momento para dar un consejo”, mencionó Blandón.
Blandón reconoce que aunque son pocos, aún hay hombres que creen que este empleo es solo para varones y le han ofendido verbalmente.
“Una vez un señor me detuvo y me dice: -súbame ese soldador que llevo-, le dije yo -no soy acarreo señor-, me moleste en ese momento, porque en su rostro vi que lo estaba haciendo por ofender y molestar”, rememoró Blandón.
La taxista afirmó que en un principio las direcciones se le complicaban y le temía a sufrir algún accidente de tránsito, el cual nunca ha llegado por la precaución con la que maneja y la previa revisión que todos los días ejecuta.
“La mujer es una buena administradora y ordenada, por eso antes de salir siempre reviso el carro, ya sé que si una llanta anda baja antes de salir debo cambiarla, hasta eso ya domino, porque ya sé donde venden las mejores llantas, los mejores repuestos, son cosas que erróneamente se cree que solo los hombres dominan y no es así”, manifestó Blandón.