Referencial.
Transportistas deben ser evaluados periódicamente, dicen organizaciones
Sugieren habilitar para el usuario una línea directa de quejas y sugerencias en las cooperativas y en el Intramma para reportar incidentes.
Organizaciones de defensa a los consumidores sugieren al Instituto Regulador del Transporte del Municipio de Managua (Irtramma) y a las cooperativas de transporte urbano colectivo de la capital, aplicar evaluaciones y monitores constantes al desempeño de conductores de autobuses públicos de la capital de cara a mejorar la atención a los usuarios del servicio.
Esta recomendación surge porque desde la semana pasada el Irtramma inició una serie de capacitaciones sobre convivencia social y relaciones humanas dirigidas a conductores de unidades de transporte colectivo de Managua, tras recientes denuncias de maltrato de conductores a los pasajeros en las unidades de autobús que precisamente en busca eliminar ese tipo de comportamientos.
“Este personal tiene que capacitarse, ya vemos la última vez que un conductor le quebró la nariz a un usuario y solamente llegaron a un acuerdo, le dio 4 mil córdobas por la quebrada de la nariz. Después vimos a dos conductores del mismo gremio agarrándose a golpes en la calle”, dice Marvin Pomares, director ejecutivo del Instituto Nacional de Defensa al Consumidor (Indec).
Rubén Arriola, director de la Consultoría de Gestor al Consumidor (CGC) manifiesta que mejorar la calidad del servicio transporte urbano colectivo, no solo depende de capacitaciones a los conductores de autobuses, sino también de la aplicación de un mecanismo o sistema de monitoreo y seguimiento de los resultados de dichas capacitaciones.
“Aplaudimos la medida, pero esta debe de ir acompañada de la supervisión por parte del Irtramma y sus inspectores en las diferentes bahías de autobuses del transporte urbano colectivo. Montar inspectores encubiertos en las unidades para supervisar verdaderamente, que no se quede en sólo una capacitación”, señala.
Por su parte, Pomares, instó al ente regulador a visitar constantemente las terminales de autobuses, “para ver el estado en el que andan los conductores porque muchas veces andan con aliento a alcohol y esto expone a los pasajeros a un accidente”.
La aplicación de encuestas directas a los usuarios al momento de utilizar el servicio también podría ayudar a medir los resultados de estos procesos de formación y sensibilización, coinciden la CGC y el Indec, esta última organización tiene experiencia en este tipo de mediciones como la que aplicó hace 6 años a usuario del transporte colectivo.
En esa encuesta, según Pomares, los hallazgos más importantes que sobresalieron fue la queja de los usuarios por el exceso de velocidad en la que conducen los choferes de autobuses, el alto volumen de la música y la radio dentro de las unidades y el exceso de pasajeros.
Ambas organizaciones sugieren también habilitar para el usuario una línea directa de quejas y sugerencias en las cooperativas y en el Intramma para reportar incidentes, establecer de manera permanente las capacitaciones y evaluaciones periódicas a los conductores y ampliar estas medidas en todos los departamentos del país.
