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Retrasos del Consulado en la repatriación de cuatro cuerpos de nicaragüenses
Familiares pueden establecer proceso unilateral, pero costos serían más elevados, según experta.
Desde hace dos meses y nueve días, el cuerpo del migrante nicaragüense Kelvin Antonio Torrez Medina, espera ser repatriado desde una morgue en Texas, Estados Unidos (EE. UU.)., luego de perder la vida en el río Bravo, en México.
Junto a Kelvin hay otros tres coterráneos que esperan el mismo proceso, que según la organización Texas Nicaraguan Community, está siendo burocrático y atrasado por el Consulado de Nicaragua, pero Lorena Vargas, abogada experta en derecho internacional, explicó que las familias ante el retraso pueden establecer un trámite unilateral, el problema es que los costos serian asumidos en su totalidad por ellos.
“Señor Samuel Trejos, cónsul de Nicaragua en Houston, Texas, demuestre su desempeño en el cargo, y resuelva esta situación a estas familias”, pidió la organización en su cuenta de Facebook.
Los otros tres nicas José Antonio García Ramírez, ahogado desde el 26 de mayo y reportado desde el 27 de junio en esa morgue; Melvin Alexander Zelaya Hurtado, ahogado desde el 26 de mayo y reportado desde 29 de junio en esa morgue; y Lester Sotero Castillo Jarquín, que perdió la vida el pasado 26 de mayo del 2022, mismo día que otros 5 nicaragüenses fallecieron ahogados.
Según Vargas, para repatriación unilateral solamente se debe acreditar su vinculación con la persona fallecida, enviando un “escrito motivado”, con todos los soportes que pueda exigir la fiscalía o el organismo que tiene a su cargo la investigación y la identificación de los cuerpos.
“Deben informarles como murieron y decir ´bueno somos familiares, vamos a viajar para que nos entreguen el cuerpo a nosotros´, pero tendrían que viajar al lugar y hacer todo a través de las autoridades consulares, todo el procedimiento para viajar e identificar y posteriormente repatriar cuerpos, es una opción de vía unilateral”, dijo.
El otro proceso que es establecido por los consulados es el que llaman de oficio, porque ayudan a sus connacionales que fallecieron en otro país en estas tragedias que se están viendo.
“Ellos se encarga de sus ciudadanos y hacen el proceso de repatriación cubriendo los gastos, pagando al cajón, dónde van a ir y contactando a los familiares, que me consta que por lo menos acá en México, desde ahí han contactado a la familia en consulado mexicano, ha participado la familia acá en México, Oaxaca, Veracruz, donde murieron varias personas, no sé si Nicaragua hace el mismo proceso”, indicó Vargas.
La especialista aclaró que en ambos casos habrá una participación de las autoridades consulares, porque tendrán que firmar y sellar algunos documentos de salida de los cuerpos.
Vargas refirió que mientras las familias posean el escrito motivado, en donde hace constar el reclamo del cuerpo, las autoridades de la morgue no pueden enterrarlo en una fosa común a causa de retrasos burocráticos, como los que viven las familias de los nicaragüenses.
“Una vez los familiares están reclamando el cuerpo, se interrumpe ese lapso 30 días continuos que marca la ley que si no se reclama el cuerpo, la morgue procede a enterrarlo en fosa común”, añadió.
Según Vargas, solamente será enterrado en fosa común si los familiares dan la autorización, mediante un próximo escrito en donde consideren que no cuentan con los recursos para la repatriación o llegar a tomar el cuerpo hasta la morgue donde se encuentra.
“Mientras tanto, la responsabilidad debe ser prepararlo muy bien en la funeraria o ya sea en el centro médico forense, donde sea que este, para que ese cuerpo dure el tiempo pertinente”, especificó.
Según la especialista, el Consulado de Nicaragua está obligado a respetar los tratados internacionales que han firmado, de ayudar a sus ciudadanos en problemas en otros países y de no poder hacerlo solicitar ayuda a terceros.
