¿Trifulcas en bares podrían ser penadas? Esto dice la Ley
Según la Ley de Seguridad Pública, los establecimientos tienen un límite de permiso para vender alcohol hasta las 12 de la noche.
Las constantes peleas que se producen entre consumidores en bares, discotecas, karaokes y otros clubes nocturnos, según defensores de los consumidores, demuestran que los dueños de estos sitios están irrespetando la Ley sobre el mantenimiento del orden y seguridad pública, que brindan un tiempo límite a los establecimientos para permitir la venta e ingesta de alcohol.
La última situación de este tipo fue en una discoteca de Granada, cuando varias personas se agarraron a golpes, mientras la música no se detuvo, ni se nota a personal de seguridad intervenir para detener la trifulca.
Posteriormente es únicamente un oficial de la Policía Nacional quien en las afueras del local intenta separarlos.
Rubén Arriola, director de la Consultoría del Gestor al Consumidor (CGC), explicó que el problema es que no hay una supervisión de las autoridades policiales de la dirección de Seguridad Pública en los establecimientos, para hacer cumplir con la ley a dueños de negocios.
“Estos establecimientos tienen un límite un permiso para vender alcohol según la Ley de Seguridad Pública, que es hasta las 12 de la noche, más allá de las 12 de la noche son algunos centros muy especiales que se les otorgó un permiso hasta las 2 de la mañana, pero la mayoría tiene un permiso hasta las 12 de la noche, otros hasta las 10 o 11 de la noche”, dijo Arriola.
Según el defensor de los consumidores hay un desinterés de los negocios de contratar al menos tres personas con especificaciones técnicas de seguridad, para evitar estos escándalos que dejan daños materiales y de reputación a los locales y en el peor de los casos pérdidas de vidas humanas.
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“No han invertido en personal de seguridad porque dicen que muy caro, pero salen perdiendo el doble, porque cuando se dan estos pleitos estoy seguro hay gente que se va sin pagar, se daña la infraestructura, se pierde dinero, se pierde buena publicidad del sitio”, agregó.
Este caso específico sucedido en Granada, según Arriola se observa incluso irrespeto hacia el único oficial de la Policía Nacional que intentó separarlos, por ello caen en un delito de desacato a la autoridad.
“Esto demuestra también deficiencia en la Policía, porque por lo menos debería de estar acompañando, una patrulla normalmente anda detrás 4 agentes en una camioneta, pero vemos que solo es un agente, parece que este señor andaba solo en la moto”, refirió.
El abogado Marvin Bonilla, afirmó que la ausencia de policías determina que sucedan este tipo de acciones que tienen relevancia jurídico-penal, no solamente para los involucrados en los altercados sino también para la sociedad en general.
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“En Granada, específicamente en esa calle de la Calzada, donde se dio este altercado, debería haber una regulación extrema y no solamente con esos altercados, los mismos negocios si usted va a Granada por la noche, ya se tomaron toda la calle, ponen mesas en media calle, no dejan lugar a los transeúntes”, argumentó Bonilla.
El abogado señaló que si una situación de alteración al orden público sucede en el local en horas distintas a las establecidas por la normativa policial, convendría en una multa al negocio.
“El consumidor, además de la sanción al negocio comete una falta penal de alteración al orden Público; de daños si acaso hay algún daño a la propiedad alguna mesa desbaratada, ahí habría una responsabilidad penal, pero no por un delito, sino por una falta”, mencionó Bonilla.
El especialista aclaró que los dueños de estos locales, tiene la responsabilidad de poseer dentro de su local agentes de seguridad, pero una vez el hecho se traslade en las afuera es un delito de alteración al orden público, que ya le competen a la Policía Nacional aplacar.
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