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2023 inició con 2 parricidios: expertos analizan las causas
Crímenes demuestran ausencia de diálogo efectivo entre familiares, indican especialistas.
El 2023 inició con dos crímenes violentos y tipificados de parricidios en Managua, que según un abogado y una psiquiatra demuestran ausencia de diálogo efectivo entre familiares.
El más reciente parricidio fue el cometido por una mujer de 30 años quien le quitó la vida a su tío David Castrillo Aráuz, de 70 años, quien presuntamente la violó hace varios años.
El hecho cometido supuestamente por Karen Patricia Coca Aguilar, sucedió en la colonia Maestro Gabriel, Managua.
El otro caso fue la muerte de Ivette Blanco, de 40 años de edad, quien murió apuñalada a manos de su hermano Jesús Antonio Blanco, quien tenía 9 días de haber salido de la cárcel.
El hecho sucedió en el barrio Martha Quezada, que pertenece al Distrito II de Managua, y antes del crimen los implicados discutieron por la propiedad.
El abogado Noel Alonso Cano, experto en derecho penal, especificó que los acusados podrían ser condenados por el delito de parricidio, delito que se paga hasta con 25 años de cárcel.
“Esos crímenes son de orden público, significa que Fiscalía, quiera o no la familia, va a actuar sin duda alguna; y obviamente va a haber un proceso en donde lo que se va a pretender siempre, es que haya una tutela judicial efectiva, significa que las víctimas y la familia, van a tener una representación en ese juicio”, agrega Cano.
De acuerdo al abogado, el crimen cometido por el ciudadano, que tenía nueve días de haber salido de la cárcel, debe servir de precedente para las autoridades en profundizar en los pronósticos de peligrosidad social de los reos antes de dejarlos en libertad.
“La Ley del Régimen Penitenciario y ejecución de la pena, Ley 473, es muy clara, las autoridades penitenciarias están en la obligación de hacer un seguimiento y una evaluación del perfil psicológico de la persona, y hacer un pronóstico acerca de la posibilidad de que este sujeto o el privado de libertad pueda reinsertarse a la sociedad, me imagino que eso lo cumplieron por lo menos el trámite administrativo, pero el hecho debe servir de alerta para las autoridades”, manifiesta.
La psiquiatra Gioconda Cajina, asegura que estas situaciones son el reflejo de una sociedad y familias que no se atienden de forma debida con especialistas al momento de detectar problemas familiares graves.
“Debe existir una atención, porque si hay estrés postraumático sabemos que es incurable, entonces es para toda la vida, vas a quedar incapacitada en tu vida sexual o puede ser una persona que ya sea fácil presa de trata de persona o para la prostitución, otros optan por el suicidio o se vuelven una persona delincuente, tal como lo fue el delincuente que destruye su moral”, indica Cajina.
En el caso de las víctimas de violencia, el no acudir a los tribunales en busca de acceso a la justicia demuestran su temor, la revictimización y la falta de confianza en el sistema, según la especialista.
“A nivel de los juzgados el tema es difícil, porque hay que dar las pruebas, a veces difíciles de aceptar para la familia, hay familias divididas y a veces hay intereses económicos muy fuertes, que van a pesar, cuando por ejemplo vemos una madre defendiendo al esposo y no a la hija, por ejemplo, cuando el padrastro es el abusador, es una situación bastante frecuente y lamentable la división”, señala.
Ambos acusados, del primer parricidio del 2023 y del último del 2022, ya están en manos de las autoridades judiciales competentes.
