Libra de frijol costaría de 23 a 25 córdobas en marzo, dice UNAG
Para establecer este precio, productores deben tener éxito en la cosecha de apante. Actualmente, el precio ronda los 36 córdobas.
De lograr resultados positivos en la cosecha del frijol para este ciclo de apante que finalizará en marzo del 2023, el precio de este producto debería rondar de 23 a 25 córdobas en mercados populares del país, estima Manuel Morales, presidente de la Unión Nacional de Agricultores y Ganaderos de Nicaragua (UNAG).
“Estamos en una situación de oferta y demanda, si la cosecha es muy buena, pues obviamente va a fluir esa producción hacia los mercados locales y tiene que bajar el frijol”, menciona Morales.
El presidente de la UNAG también refiere que debe tomarse en cuanto a cuanto se les está pagando el quintal al productor.
“Al inicio de la postrera el productor estaba recibiendo de 1,800 a 2,000 córdobas, si llega ese precio, pues debería andar entre 23, 24 y 25 córdobas”, indica.
Actualmente, el precio del frijol ronda de 35 a 36 córdobas en mercados populares, lo que según la UNAG se debe a que la cosecha que está en estos centros de compras es la postrera y la mayoría ya estaba comprada por Honduras y El Salvador y terminó exportándose a esos países.
“Tenemos en este país una comercialización abierta para las exportaciones, hay mucha producción, sobre todo la de postrera que la compraron los salvadoreños y hondureños; los salvadoreños han venido instalándose en el país, también pasa con los lácteos, pues hondureños y salvadoreño en las zonas del triángulo lechero tienen instalaciones, han comprado tierra y están dedicados a eso, pasa lo mismo con el frijol lo están exportando, lo maquilan y lo vuelven a exportar a Estados Unidos”, señala Morales.
En enero Nicaragua se exportó 9 millones de dólares en frijoles, lo que representó 4 millones de kilogramos en volumen, según datos de la Asociación de Productos y Exportadores de Nicaragua (Apen).
Manejo del frijol está complicado
Para esta cosecha de apante el sector espera 2 millones de quintales producidos, lo que incidiría en la reducción del precio al consumidor final, pero reconocen actualmente existen problemas del cambio climático en algunas zonas que dificultarán cumplir la meta.
“La semana pasada empezamos la cosecha de apante, con algunos problemas, porque en las zonas de apante, que son las zonas húmedas del país, ha estado persistiendo la época de lluvia, entonces resulta que eso afecta la calidad del frijol, sale demasiado húmedo y esto hace el manejo muy complicado”, expresa.
La cosecha de apante se está levantando en la zona del Norte del país, como es el municipio de Jalapa, en Nueva Segovia, Wiwilí de Jinotega, Nueva Guinea y San Carlos, en el departamento de Río San Juan.