Falta de espacios adecuados y de ventilación afecta a comerciantes del Oriental
Los comerciantes toman medidas ante las altas temperaturas.
Damaris Sevilla, de 50 años de edad, trabaja en el mercado Oriental desde hace 2 décadas. Hace 12 años le diagnosticaron hipertensión arterial, y las altas temperaturas sumadas a la poca ventilación del centro de compras han hecho que asistir a su centro de labores sea un reto para ella.
“Yo padezco de hipertensión arterial, diabetes, lupus y varias enfermedades crónicas. Siempre estoy con el abanico encendido, sudo mucho, antes estaba más activa y ahora permanezco un poco más tranquila, me tomo las pastillas, y consumo bastante agua, el mercado Oriental no presta las condiciones, tenemos esas condiciones adversas para la salud de muchos de los que padecemos de hipertensión, por la misma lluvia, nosotros mismos nos hemos encerrado en realidad, esos techos que nosotros los ponemos de un lado a otro para no mojarnos también nos afecta cuando hay altas temperaturas”, señaló Sevilla, comerciante.
Sevilla agrega que de repente se sale donde hay más ventilación "y ahí me voy a estar un rato porque hay momentos en los que siento que no voy a aguantar la presión”, añadió.
Los comerciantes toman medidas ante las altas temperaturas y concuerdan en que el mercado no presta las condiciones de ventilación y espacios adecuados.
“Aquí en el mercado generalmente pasamos bebiendo agua de esas que venden a 3 córdobas o 2 por 5 córdobas, los que tienen posibilidades comprar agua de mejor calidad lo hacen. El mercado siempre ha sido cerrado, el problema es que muchas personas no toman las medidas de precaución, por ejemplo, una persona hipertensa no puede venir al mercado en estas condiciones”, opinó Frankilg Gómez, comerciante.
“Entre las medidas de las precauciones que tenemos aquí, es estar frente al abanico, tener todos los abanicos que podamos encendidos, pero realmente las temperaturas han estado muy altas. La mayoría de los tramos están encerrados, no entra ventilación del todo y es bastante peligroso”, aseguró Jorge Rojas, otro comerciante.
La tarde del pasado martes, una señora de 43 años de edad perdió la vida en uno de los reconocidos callejones del mercado oriental, se presume que sufrió un infarto debido a las altas temperaturas. Ante esto, tanto el Instituto Nacional de Defensa al Consumidor (Indec) como el experto en temas municipales, Marvin Martínez, coinciden en que el ordenamiento del mercado más grande de Centroamérica ha sido un reto histórico, a pesar de que se han destinado 400 millones de córdobas para su descongestionamiento.
“Estos 400 millones de córdobas, que se supone se van a implementar para este descongestionamiento, es insuficiente para la gran cantidad de personas que están dentro del mercado, tanto comerciantes como personas que llegan a hacer sus compras y lamentablemente no hay una un plan de prevención, solo se corre a la emergencia, a tapar baches en el sentido de resolver a lo inmediato, pero a largo plazo no se ha dado la solución efectiva para que no pasen situaciones como la de ayer”, alegó Martínez.
“El mercado Oriental ha sido un problema recurrente de años, este mercado se ha venido expandiendo a raíz del terremoto de 1972, actualmente son 140 manzanas las que cubre todo el mercado, ya absorbió el 35 % de Ciudad Jardín, y afecta a 7 barrios aledaños. Ha sido una tarea muy difícil ordenar ese mercado, estamos hablando de que diariamente se movilizan 60 mil trabajadores, sin mencionar la cantidad de visitantes”, expresó Ricardo Vásquez, metodólogo del Indec.
El mercado Oriental es conocido por ser el más grande a nivel centroamericano, y poco a poco se ha ido expandiendo aún más. En 2017, luego de un incendio que acabó con más de 200 tramos, se conformó una comisión interinstitucional para abordar un posible reordenamiento de los tramos, sin embargo, este no se ha logrado, y aunque recientemente se han inaugurado nuevos galerones, los comerciantes deciden quedarse en los mismos puntos, muchos, adueñándose de las calles.