Publicidad de los influencers con contratos y tarifas a discrecionalidad
Expertos sugieren regular esta publicidad para evitar daños a las empresas y emprendedores.
Nicaragua actualmente carece de una ley o normativa que regule el trabajo de los llamados “influencers”, quienes en sus distintas redes sociales superan los 100 mil seguidores.
En estos días ser “influencer” es un trabajo para muchos, pues ofrecen su imagen para vender sus servicios de promoción de marcas a sus seguidores en las plataformas digitales.
Un abogado y una experta en marketing digital, reconocen que no poseer regulaciones en este tipo de labor generan informalidad en el rubro publicitario a nivel nacional, pues se deja discrecionalidad de las partes, la firma de un contrato.
El abogado Marvin Bonilla, explica que, al no estar regulado mediante ley, algunos influencers ofrecen “de boca” hacer un TikTok, un reel (video corto) y publicitarlo en sus redes, pero no detallan el segmento al que va dirigido.
“A veces no se hace un contrato, como se hace con una empresa que cotiza, que paga impuesto, no se elabora un documento, una empresa legal de publicidad, te hace un contrato, de un mes o dos meses de publicidad, te detalla a qué segmento va dirigido”, indica.
El abogado remarca que la falta de un contrato podría generar que el establecimiento o emprendedor que solicita los servicios del influencer, no pueda establecer un reclamo legal si no le gusta la publicidad.
Carmen Cuadra, experta en marketing digital, detalla que al hacerse mediante contratos de palabra estos arreglos, varias ambigüedades pueden generarse en el camino.
“Tengo que detallar bien que, si voy a hacer el anuncio, debo pensar quién va a grabar, quién va a editar, qué equipo va a poder hacer la producción, quién va a hacer el guion, si eso no está establecido podríamos tener problemas a futuro”, añade.
Interacciones son más vitales que el número de seguidores
Recientemente, a través de su cuenta de TikTok el propietario de una popular perfumería nacional, contó su experiencia al cotizar un servicio publicitario con un influencer, el que asegura le estaba cobrando hasta 500 dólares.
“No tenía una estadística real, sino que lanzaban la promoción, la historia y el reels, pero no me decían mira con nuestra historia, vas a conseguir un 5 o 10% de más de tus ventas o algo por el estilo”, revela en su video el propietario.
Así debo seleccionar a mi influencer
Cuadra, afirma que es vital revisar las estadísticas y el público meta que tiene el influencer qué deseo contratar, para promover mi marca.
“Yo tengo que preguntarme y observar que si al hacer una publicación esta persona no recibe tantas interacciones, equivale lo mismo que a publicarlo en un medio tradicional, que no espero tantas interacciones de regreso”, enfatiza.
La experta en marketing digital señala que otro error en el que caen las empresas y emprendedores es ofrecer regalías o algún producto al influencer sin previo aviso o contrato, bajo la esperanza que este promocione el producto en sus redes, agradeciéndolo.
“Si no hay contrato de por medio, no está obligado a agradecerme y promover mi marca públicamente, debemos quitarnos esas malas costumbres”, añade.
La falta de una normativa sobre la publicidad de los influencers, también genera cobros que no estén regularizados y queden a discrecionalidad.