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Portación de armas de fuego y penas de cárcel por falta de medidas de seguridad
La Ley 510 establece responsabilidades penales para los adultos que incurren en negligencia, expertos aconsejan tomar medidas.
Tener un arma de fuego en el hogar es una responsabilidad, más si hay menores de edad, pues una simple manipulación puede causar accidentes graves que lamentar. No tomar las medidas de seguridad correspondientes puede ser penado en Nicaragua.
De acuerdo al abogado, Víctor Somarriba la ley establece responsabilidades penales para los adultos que incurren en negligencia, por tanto, aconseja tener cuidado y dejar las armas en alguna caja fuerte o lugar bajo llave, con las municiones aparte.
"Las penas de cárcel pueden ir de una a cuatro años para las personas, porque en estos casos los delitos podrían ser la exposición de personas al peligro, cuando sucede una tragedia de la magnitud que la persona muera por un accidente de esto, las autoridades hacen las debidas investigaciones y conforme a eso dictan una sentencia o proceso por el cual deberá de pasar el propietario del arma”, expresa.
Ley que regula y controla su uso
En Nicaragua la Ley 510 que regula y controla el uso de armas de fuego, estipula para los civiles una serie de requerimientos para portarlas, les exige someterse a diversos exámenes y estudios para obtener una licencia.
Por otro lado, los expertos explican que ciertos tipos de armas, por su fácil manipulación, tienen más probabilidades de causar tragedias en los hogares, tal es el caso donde el arma es automática o que sea estilo revolver.
"Las automáticas son las más renuentes en causar tragedias, esto por el fácil manejo de ellas y que con solo caerse pueden dispararse e impactar a un ser humano, por otro lado, el revolver es más difícil de accionar para un menor, pero también existe la probabilidad, los menores de edad al no tener conciencia de estos objetos o por curiosidad los llegan a accionar y es ahí donde suceden tragedias fatales, es importante la responsabilidad y el resguardo del arma en todo momento”, dijo Carlos Adán Gutiérrez, experto en seguridad ciudadana.
El pasado martes, en el municipio de El Realejo, en Chinandega, un niño de 6 años murió luego de manipular un arma y dispararse accidentalmente.
El revolver lo había encontrado en la casa de sus abuelos, por lo que las autoridades desarrollan una investigación para determinar responsabilidades.
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