Guillermo Rodríguez
Veda restringe el consumo del pinol de iguana en esta temporada
El consumo de este platillo es cuestionado por los ambientalistas.
En Nicaragua, el pinol de iguana, es uno de los platillos tradicionales que se preparan en tiempos de Cuaresma, cuyos ingredientes básicos son el maíz, la carne del reptil y sus huevos. En esta temporada del año es uno de los antojos más demandados en los comedores populares.
Paola Rayo, quien se dedica a la elaboración de este platillo, específica que primero se tuesta y muele el maíz y despues se lava y se saca la casulla con un colador.
Preparación
El siguiente paso es limpiar la iguana, retirar las tripas y huevos, lavar, luego se colocan nuevamente los huevos en su interior y se cierra la herida; luego se asa, se retira del fuego y se raspa la piel, finalmente se lava con limón.
Posteriormente, retire nuevamente los huevos a la iguana y cuézalos en agua; bajélos al primer hervor.
De acuerdo a la experta de la cocina, el siguiente paso es cortar la iguana y ponerla a cocer en agua, con cebolla, ajo, sal. "Cuando suavice la carne, hay que quitarle la piel, humedecer el maíz con el caldo resultante, agregue la carne y culantro. Luego se procede a batir los ingredientes con el pinol hasta que se ablande”.
Una vez preparada la comida, esta puede complementarse con bastimento, que por lo general es el banano cocido.
Consumo es cuestionado por ambientalistas
Sin embargo, el consumo de este platillo en esta temporada del año es cuestionado por ambientalistas como Raomir Manzanares, quien recuerda que las especies de garrobo negro e iguana verde, son protegidas por el Sistema Nacional de Veda del país, en un periodo comprendido entre el 1 de enero y el 30 de abril de cada año.
La Ley para la Conservación y Protección de Iguanas Verdes y Garrobos, Ley 547, establece que la especie debe tener cierto tamaño para poder ser capturada.
La normativa vigente actualmente prohíbe, “trato cruel o empleo de métodos que involucren sufrimiento o daño para estas especies en su captura, manejo y comercialización; la caza utilizando como método el prender fuego en sus madrigueras y la exportación de estos reptiles vivos o muertos, así como de sus huevos”.
En tanto, la Ley para la Protección y el Bienestar de los Animales Domésticos y Animales Silvestres Domesticados, Ley 747, establece sanciones que van de 100 a 3 mil días multas de trabajo.
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