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Consecuencias de la falta de equilibrio en la crianza de los hijos
Poner en práctica la crianza respetuosa puede ser un desafío, ya que requiere de paciencia, empatía y autocontrol.
A criterio del psicólogo clínico Arcángel Blanco, actualmente los padres de familia están criando a sus hijos aplicando modelos muy permisivos o muy autoritarios.
El especialista plantea esta observación en el marco del Día Internacional de la Crianza Respetuosa, que se conmemora cada 02 de septiembre, una fecha que se recuerda la importancia de una crianza que se base en el amor, el respeto y la igualdad.
El experto, desde su experiencia, afirma que, muchos padres de familia quieren que sus hijos sean felices y les compran todo lo que ellos quieren, convirtiéndose en un libertinaje donde al niño no se le dice nada, no se le corrige, llegando a un extremo insano.
Por ello recuerda que “el objetivo de la crianza respetuosa, es la concientización de la misma y está enfocada principalmente en el abordaje de mejorar los patrones o crianzas dentro del hogar, es decir, sacar del hogar toda aquella crianza que esté relacionada con la violencia, el maltrato, el abuso sea psicológico, físico o de cualquier índole donde los niños, niñas y adolescentes puedan crecer de manera adecuada”.
Consecuencia y beneficios
Este psicólogo explica que, una crianza inadecuada puede tener como consecuencia inseguridad en los niños y niñas que al llegar a la edad adulta desarrollan el temor de crear relaciones sanas, sufren de miedo al abandono y tienen dificultadas para gestionar el estrés.
El especialista indica que la crianza respetuosa nos transmite la visión de que los límites son buenos porque generan seguridad y favorecen una buena relación con el entorno.
Sin embargo, una diferencia muy importante con respecto a otros métodos o estilos más convencionales, es que en la crianza respetuosa o positiva los límites se establecen desde una disciplina positiva: se busca favorecer los cambios de comportamiento mediante el razonamiento, con empatía y con respeto.
“Es importante enseñarle al niño que dentro de la crianza él tiene responsabilidades, estudiar, hacer sus tareas, pero también goza de beneficios”, expresa.
Poner en práctica la crianza respetuosa puede ser un desafío, ya que requiere de paciencia, empatía y autocontrol. Sin embargo, los beneficios a largo plazo son enormes, tanto para los niños y niñas como para los padres, asegura el especialista.
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