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IPSA registra aumento de casos de gusano barrenador en animales

Gobierno ha invertido un costo aproximado de 1.3 millones de dólares para erradicar el gusano.


El Instituto de Protección y Sanidad Agropecuaria (IPSA) reporta un incremento significativo de infecciones por gusano barrenador en Nicaragua desde octubre de este año.

Según los datos más recientes, se han registrado 6,432 casos en animales y cuatro en humanos. Mientras que en la primera semana de octubre se reportaban 4,036 casos confirmados, de los cuales, 3 mil 61 eran en ganado bovino y de estos el 40% terneros. Este parásito afecta a bovinos, porcinos, equinos, caninos, caprinos y aves.

Para combatir el brote, el IPSA implementó un sistema de dispersión de moscas estériles utilizando cuatro avionetas especializadas. Cada una tiene la capacidad de liberar hasta 4 millones de moscas estériles por vuelo.

El costo de operación por avioneta asciende a 1.3 millones de dólares. Además, se han instalado equipos como cuartos fríos, con precios que oscilan entre 150,000 y 200,000 dólares, destinados a conservar las moscas en condiciones óptimas antes de su liberación.

Desde el inicio del operativo, el IPSA ha inspeccionado 1,275,776 animales en 38,948 fincas y 8,854 hogares, aplicando tratamientos a más de 124,000 casos detectados.

Este esfuerzo incluye charlas de sensibilización y coordinación con organismos internacionales como la Comisión Panamericana para la Erradicación del Gusano Barrenador (Copeg).

El director del IPSA, Ricardo Somarriba, destacó el reconocimiento internacional al esfuerzo técnico de Nicaragua en el combate del gusano barrenador. Instituciones como APHIS y UIRSA han elogiado la rápida movilización de recursos y el compromiso del país para enfrentar este desafío sanitario.

“Hemos demostrado capacidad técnica y logística; nuestras avionetas logran cubrir las áreas afectadas en 15 minutos, un tiempo que supera los estándares de otros países”, señaló Somarriba.

Con una inversión acumulada de 14 millones de dólares, el gobierno de Nicaragua ha garantizado los recursos necesarios para fortalecer la estrategia de control del gusano barrenador.

Las acciones incluyen la basificación de las avionetas en el país, lo que permite una respuesta inmediata en las zonas afectadas.