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Piscinas son una atracción en un barrio de Managua
Ciudadanos prefieren quedarse en casa durante la Semana Santa.
El barrio Rubén Darío, en Managua, ha tomado notoriedad desde hace algunos años por convertirse en una playa callejera, por la instalación de piscinas en las afueras de sus viviendas.
El objetivo es claro sofocar el calor y disfrutar de las vacaciones de Semana Santa, por ello vecinos instalan todo tipo de piscinas, desde las más pequeñas y económicas hasta las grandes, cuyos precios fácilmente superan los 15 mil córdobas.
Vecinos explicaron a medios de comunicación nacionales que anualmente previo a la Semana Santa cada persona gestiona su permiso ante la Alcaldía de Managua y la Policía Nacional para tomarse la calle por algunos días.
Cabe destacar que no se trata de una calle principal y entre los mismos vecinos tienen el acuerdo de parquear sus vehículos lejos de sus hogares y en las horas acordadas desintalar las piscinas y permitir el acceso.
"Nos evitamos accidentes y, cuando no tenemos medio de transporte, es mejor reunir o ahorrar para comprar una piscina, porque estamos más seguros acá y disfrutamos entre vecinos", aseguró Manuela Barrera a un medio de comunicación local.
Son varias cuadras en este barrio donde además de las piscinas, los ciudadanos invirtieron en flotadores, bebidas y la preparación de alimentos.
El agua de las piscinas, suele reutilizarse para el riego de plantas, el lavado de vehículos, entre otros usos.