Indio Maíz sigue bajo amenaza por focos de calor
El 12 de abril, el gobierno anunció que el fuego en Indio Maíz había sido controlado, pero Fundación del Río sostiene que no ha podido constatar in situ los daños que ocasionó el fuego en la zona.
De los 639 focos de calor generados por incendios que ha identificado el gobierno en estos días en varios puntos del pais, 19 han sido detectados en la zona de amortiguamiento cercana a la reserva Indio Maíz, un área protegida donde hasta hace pocos días se consumieron más de 6 mil 500 hectáreas de bosque por un incendio.
En los últimos días, 1,500 efectivos del Ejército de Nicaragua han sido desplegados por orden del gobierno en la reserva Indio Maíz para eliminar los 19 focos de calor que todavía permanecen en la zona de amortiguamiento.
Saúl Obregón, de la junta directiva de Fundación del Río, aseguró que el riesgo de incendio en Indio Maíz todavía sigue latente, pues estos focos de calor de no se controlados pronto, pueden extenderse nuevamente a la reserva.
“Hemos escuchado que ya no hay fuego en la Indio Maíz, esto no es del todo cierto, por que se reportan un sinnúmero de incendios en la zona oeste en el sector del municipio de El Castillo, y consideramos que las instituciones públicas deben de actuar así como lo hicieron en el incendio en el sector de San Juan de Nicaragua con los incendios que están ocurriendo en el área núcleo, mas vinculados al área de El Castillo”, sostuvo.
El 12 de abril, el gobierno anunció que el fuego en Indio Maíz había sido controlado, pero la ambientalista Fundación del Río sostiene que no ha podido constatar in situ los daños que ocasionó el fuego en la zona.
Los ambientalistas han recomendado 10 acciones para proteger la reserva, una de las principales es expulsar a los colonos y aplicarles la ley para que cese el avance de la frontera agrícola.
También demandan a las autoridades capturar y castigar con la Ley a los responsables del siniestro, además que se incluya a las comunidades indígenas e la evaluación de daño ambientales y del ecosistema que permita delimitar las áreas afectadas y su capacidad de recuperación, para desarrollar los mejores procesos de restauración.