Más de 90 personas de Managua y otros puntos del país permanecen detenidas ilegalmente en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial en la capital, conocidas como El Chipote.

Tras los ataques de la Policia Nacional con el apoyo de paramilitares en el departamento de Carazo el pasado lunes, más de 40 ciudadanos de esa localidad fueron apresados y trasladados a este centro de detención.

Sandra María Ortiz, quien habita en la segunda etapa del barrio diriambino Roberto López, relata que tiene a sus tres hijos detenidos en El Chipote. Ella cuenta que el día lunes durante la denominada "operación limpieza" sus hijos fueron sacados de su vivienda por la fuerza. Uno de ellos, al momento de su detención, fue herido de bala en uno de sus pies.

Richard Sebastián López Ramos junto a su pareja a Eddy González Padilla también forman parte de la lista de detenidos de este barrio de Diriamba. A González los paramilitares lo golpearon salvajemente al momento de su detención, según denunció Marcia Padilla madre del detenido.

Campamento improvisado

A las afueras de El Chipote se ha instalado una especie de campamento improvisado para los familiares de los detenidos, gracias al apoyo de ciudadanos voluntarios que les han llevado asistencia humanitaria como colchonetas, comida, baños portátiles, agua, y asistencia médica.