Miles marchan en respaldo a obispos de la Conferencia Episcopal de Nicaragua
Los obispos de la Iglesia Católica en Nicaragua han sido señalados como "golpistas", por el Gobierno del presidente Daniel Ortega.
Miles volvieron a las calles este sábado 28 de julio, en una peregrinación como respaldo a la labor de los obispos de la Iglesia Católica en Nicaragua, tras ser señalados por las autoridades gubernamentales de "golpistas".
Ante esto, la población nicaragüense y diversos sectores del país se unieron para mostrar su apoyo a los obispos y sacerdotes, portando banderas de Nicaragua y los estandartes de la Iglesia católica. Dicha peregrinación inició en la rotonda Jean Paul Genie y concluyó en la Catedral Metropolitana de Managua.
El pasado 19 de julio, durante la conmemoración que cada año realiza el Gobierno por la Revolución Popular Sandinista, el presidente Daniel Ortega, dijo que los templos católicos habían sido usados "para guardar armamento para salir a atacar", lo que fue negado por los purpurados.
Miles marchan en #Managua como respaldo a la labor de los obispos de la Iglesia Católica en #Nicaragua pic.twitter.com/yo7oKPJR6c
— VOS TV (@VOSTV) 28 de julio de 2018
“Me dolió que mis señores obispos tuvieran la actitud de golpistas”, dijo en ese momento el mandatario nicaragüense de quienes también son mediadores y testigos del Diálogo Nacional, el cual se encuentra suspendido.
Desde el inicio de la crisis, los obispos y sacerdotes de la Iglesia Católica nicaragüense han pedido paz y han realizado gestiones humanitarias para cesar los ataques y represión por parte de grupos parapoliciales y agentes de la Policía Nacional en diversos municipios de Nicaragua. Además, las parroquias han servido de refugio para la población que ha salido a manifestarse de manera pacífica y ha sido atacada por elementos armados.
Uno de los casos más recientes fue lo sucedido en la Iglesia Divina Misericordia, donde jóvenes que se encontraban atrincherados en la UNAN-Managua y que fueron atacados por parapoliciales buscaron refugio en el templo, el cual fue atacado por más de 10 horas.