Obispos insisten que se reanude el diálogo, a pesar de ataques recibidos

A pesar que el Gobierno de Nicaragua no ha mostrado la mínima voluntad para continuar el Diálogo Nacional, los obispos de la Conferencia Episcopal aseguran que este mecanismo es la única salida a la crisis que atraviesa el país desde el 18 de abril, día que iniciaron las protesta contra el Gobierno del presidente Daniel Ortega.

Los obispos no pierden la esperanza en que los actores del Diálogo Nacional vuelvan a sentarse a la mesa de negociaciones que fue suspendida desde mediados de junio.

Para monseñor Rolando Álvarez, obispo de la diócesis de Matagalpa, “siempre el dialogo nos va a ayudar a encontrar soluciones que sean para el bien común”.

Álvarez asegura que el Diálogo es un espacio muy legítimo y la población está anhelando la reanudación del mismo, finalizó el obispo.

A pesar que el presidente Ortega tildó a los obispos de “golpistas” el pasado julio, los jerarcas católicos confían y esperan que nuevamente se retome las negociaciones y buscar soluciones pacíficas a la crisis que agobia a todo el país.

Monseñor Jorge Solórzano, de la diócesis de Granada, aseguró que están dispuesto a continuar como mediadores y testigos del Diálogo Nacional.

“Nosotros estamos siempre disponibles para el diálogo, dispuestos a pesar de todas las situaciones que hemos vividos y a los ataques que hemos sufrido, pues estamos siempre dispuestos a colaborar por el bien de Nicaragua”.

La Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia a través de varios comunicados han instado al Gobierno a retomar el diálogo, pero este ha hecho caso omiso, igualmente organismos internacionales han exhortado que se reanude.