Son las 12:45 del medio día. Un grupo de al menos 15 hombres originarios de Nicaragua, están a las afueras de la Casa de María Auxiliadora, a unas cinco cuadras del famoso Parque de La Merced, en la capital costarricense. Ahí, como parte de la obra social Sor María Romero, se comparten alimentos a los nicaragüenses que buscan refugio por la crisis de su país.

La mayoría habla de todo lo que están viviendo en San José. Desde que llegaron hace más de un mes, cómo están viviendo y su actual situación, entre tantas cosas; sin embargo, lo que más resuena es que no tienen alimentos, un lugar donde vivir y menos un puesto de trabajo para subsistir. En su mayoría son jóvenes que han huido de Nicaragua por la inseguridad, otros por participar en marchas antigubernamentales o ayudar en los tranques.

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Durmiendo en parques

“Tengo 40 días de dormir en la calle”, relata un hombre de unos 35 años de edad, moreno y con el ojo derecho morado, aparentemente producto de una fuerte lesión. El cuenta que es originario de Nicaragua, mientras espera turno para ingresar al lugar donde les darán el almuerzo.

Según él, no tiene donde quedarse, no tiene dinero, y la mayoría de los días de estar en Costa Rica ha dormido en las calles y bancas de los parques con un grupo de nicas con la misma historia.

“A veces los costarricenses nos regalan comida, desayuno, a veces nos vamos a pedir y a veces la gente cree que uno no quiere trabajar” relata mientras sus amigos y compañeros en el exilio secundan las declaraciones.

Otros del mismo grupo de hombres cuentan que a veces, cuando logran dormir en una cama, es porque han pagado 2,000 mil colones que equivalen a un poco más de cien córdobas.

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Ayuda de organismos de Derechos Humanos

Afuera de la Casa de María Auxiliadora los escucha Álvaro Leiva, el primer ciudadano nicaragüense en recibir asilo político del Gobierno costarricense. Leiva es el presidente de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH), quien actualmente está haciendo un censo de los miles de nicas que llegaron aquí por la crisis.

Pasa la una del medio día y Leiva continúa en medio de los migrantes y les comunica la importancia de organizarse para poder tener mayor control y ayudar de alguna manera.

“Nosotros como organismos de Derechos Humanos, lo que le pedimos a nuestros conciudadanos es buscar la asistencia de los organismos para nosotros poder desarrollar los tres componentes que se necesitan para el refugio” les explica el defensor, a los que buscan refugio.

La ANPDH está terminando de instalar su oficina en San José para avanzar con el censo que inició hace dos semanas. Según Leiva, ya tiene en la lista a más de 1,200 nicaragüenses. Con esto, manifiesta el funcionario, garantizará asistencia y apoyo a los nicaragüenses en los trámites de refugio.

Un carnet para comer

Es la 1:08 de la tarde y todos pasaron al lugar que dirigen unas religiosas y que apoyan otras grupos civiles para asistir a los migrantes. Pasan uno a uno donde se reparte la comida. El menú es: arroz, lentejas en salsa con carne y se aprecian algunas verduras, acompañada de leche con fresa.

Es muy notorio que muchos comen con prisa, tiene hambre, otros la degustan más despacio, pero al final algunos repiten en la fila, la comida en panas es bastante.

El requisito para poder comer aquí, es tener carnet provisional de refugiado, o documento de programación de la cita, algunos no lo tienen pero al final todos logran entrar y comer.

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María Elizondo, una de las fundadoras de SOS Nicaragua DD.HH. desde Costa Rica, explica que a diario reciben a unos 400 migrantes. “Les damos desayuno y almuerzo”, a veces se les da ropa zapato y otras cosas más para la higiene personal, según ella se hace desde que la crisis migratoria incrementó a eso del mes de junio.

La mayoría de migrantes llegaron a suelo costarricense de forma irregular, algunos con cédula, pasaporte y una gran mayoría sin nada. Aún así, el Gobierno del presidente Carlos Alvarado les tramita la cita para carnet de refugiados, explica la directora General de Migración y Extranjería, Raquel Vargas, quien informó que hasta la fecha han recibido 30 mil solicitudes de refugio, diariamente hay unas 200 solicitudes.

Hasta la fecha este país ha otorgado 17 mil carnet provisional de refugio y que está dispuesto a recibir a más nicaragüenses.