Foto Cortesía CIDH.

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CIDH continúa en monitoreo sobre crisis en Nicaragua

Durante la sesión se hizo un resumen de la evolución que ha tenido el contexto nicaragüense, mismos que pueden constarse en los diversos informes que ha realizado la Comisión para documentar la represión en la que vive la ciudadanía.


En el segundo día de audiencias públicas de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH, realizada este jueves 14 de febrero en Bolivia, nuevamente se retomó el caso de Nicaragua y la grave situación sociopolítica que atraviesa el país desde el mes de abril de 2018.

Durante la sesión se hizo un resumen de la evolución que ha tenido el contexto nicaragüense, mismos que pueden constarse en los diversos informes que ha realizado la Comisión para documentar la represión en la que vive la ciudadanía.

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Antonia Urrejola, relatora para Nicaragua, explicó la situación que enfrenta el país, destacando los siguiente panoramas: continúa el cierre de organismos nacionales defensores de los derechos humanos, extensión de procesos judiciales ilegales, falta de independencia en el Poder Judicial, cierre de medios de comunicación, entre otras formas de represión.

Sobre los presos políticos, Urrejola manifestó que sí existen detenidos políticos y se trata de personas capturadas sin ningún tipo de orden judicial y que luego se le inventan cargos, con procesos “judiciales que no son los adecuados”.

Edison Lanza, relator especial para la libertad de expresión de la Organización de Estados Americanos, OEA, se refirió en específico al caso de Lucía Pineda y Miguel Mora, periodistas de 100% Noticias.

“Mi solidaridad entonces es para Miguel Mora y Lucía Pineda quienes se encuentran sujetos a tratos crueles y degradantes en la prisión por el hecho de ser periodistas”, comentó el relator.

Representantes de la sociedad civil en la audiencia expresaron que la represión continúa vigente casi 9 meses después del estallido social, poniendo como ejemplo que algunas organizaciones no gubernamentales están trabajando en bajo perfil por miedo a ser detenidos.

Esmeralda Arosemena de Troitiño, presidente de la CIDH, expresó su solidaridad y compromiso que tiene la organización de acompañar al pueblo de Nicaragua.

“CIDH junto con el MESENI seguirá el proceso de monitoreo. Nicaragua no está sola”, destacó.