Referencial
Alimentación adecuada para pacientes con enfermedad renal crónica
Se debe tener cuidado con el consumo de café y lácteos, ya que pueden afectar el balance de electrolitos.
La enfermedad renal crónica es una condición que puede tener diversas causas, siendo la diabetes y la hipertensión arterial las principales.
Según la nutrióloga, Helen Araya, el manejo nutricional es fundamental para los pacientes en los diferentes estados de esta enfermedad.
La especialista explicó que en los primeros estados (estado 1, estado 2 y estado 3A) los pacientes pueden seguir una alimentación saludable, guiada por los principios de la dieta mediterránea, con proteínas de calidad, carbohidratos complejos y grasas saludables.
Sin embargo, es importante evitar los alimentos ultraprocesados, ricos en sodio, grasas y azúcares.
Además, se debe tener cuidado con el consumo de café y lácteos, ya que pueden afectar el balance de electrolitos.
El estado 1 se caracteriza por un daño renal leve, con una función renal normal. El estado 2 implica un daño renal moderado, con una ligera disminución de la función renal. Mientras que el estado 3A corresponde a una disminución moderada de la función renal.
A medida que la enfermedad avanza, a partir del estado 3B, se requiere un ajuste más preciso de la ingesta de proteínas y calorías, siempre con base en el peso ideal del paciente, y no al peso actual.
Asimismo, se debe tener especial cuidado con la preparación de los alimentos, realizando doble cocción para reducir el contenido de fósforo y potasio.
El manejo nutricional, junto al tratamiento médico adecuado, es clave para ralentizar la progresión de la enfermedad renal crónica y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
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