Cortesía

Cortesía

Niños, niñas y adolescentes no están exentos de ideas suicidas

Hasta el 2022 el suicidio era la cuarta causa de muerte entre los adolescentes y jóvenes de 15 a 29 años en el mundo, según OMS.


Con frecuencia, el suicidio se ve como una manera de dar fin a la desesperanza o frustración abrumadora, o como la forma de ponerle un alto a un problema para el que no se encuentra una solución. En la mayoría de casos esta conducta es propia de las personas adultas, sin embargo, las ideas de suicidio en niños, niñas y adolescentes es una realidad, explica un Ludendort Suce, psicólogo clínico.

El especialista explica que este grupo poblacional se vuelve muy vulnerable ante situaciones de estrés y se debe tener mayor cuidado, sobre todo cuando los niños, niñas y adolescentes presentan algunos indicios.

“Se tiene la percepción que los niños no tienen este tipo de conductas, que no se deprimen, ni sienten emociones. Alguien podría pensar que los niños no tienen problemas, no trabajan, no mantienen a la familia, el asunto es que el niño, no verbaliza lo que siente y quizás es víctima de un ambiente estresante que lo sume en miedo y muchas veces no sabe como superar ese temor", añade.

Señales suicidas

Cuando hay un cambio repentino en la conducta del niño, niña o adolescente y comienza a orinarse en los pantalones, comienza a comerse las uñas, presenta alopecia, no quiere ir a clases, falta de apetito, entre otras pueden ser los indicios que apuntan a que un menor de edad piense en el suicidio, advierte.

Entre otros elementos destacan, el hecho de descuidar el aspecto personal, hacer afirmaciones suicidas, comportamiento agresivo u hostil, escaparse del hogar, un cambio en la personalidad (por ejemplo, pasar de ser alegre a ser callado).

Causas del pensamiento suicida

Algunas de las causas que pueden aumentar las ideas suicidas en los niños y adolescentes es la depresión u otros problemas de salud mental como trastorno bipolar, uno de los padres con depresión o problemas de consumo de alcohol o drogas, un intento de suicidio anterior, un amigo, compañero, familiar o héroe (como una figura deportiva o un músico) que recientemente haya intentado suicidarse o se haya suicidado o una vida familiar conflictiva o donde exista el maltrato.

Hasta el 2022, el suicidio era la cuarta causa de muerte entre los adolescentes y jóvenes de 15 a 29 años en el mundo, después de los accidentes de tránsito, violencia y tuberculosis, indican datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En ese mismo año el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) alertó que las tasas de autolesiones, suicidio y ansiedad entre niños y jóvenes en el mundo eran alarmantemente altas con una escala global de más de 20 por ciento de los adolescentes sufrían trastornos mentales, siendo el suicidio la segunda causa de muerte entre los muchachos de 15 a 19 años.

➤ Suscríbete a nuestro canal de YouTube

También puede interesarte: