¿Cómo mantener una alimentación saludable?

Mantener una alimentación saludable es fundamental para cuidar nuestra salud física y mental. Una dieta equilibrada aporta los nutrientes necesarios para que nuestro cuerpo funcione correctamente, nos ayuda a prevenir enfermedades y mejora nuestra calidad de vida.

Una buena alimentación contribuye a reforzar el sistema inmunológico y previene enfermedades como infecciones y gripes. “Nutrientes como las vitaminas C, D, E, el zinc y los antioxidantes que se encuentran en frutas, verduras y otros alimentos naturales fortalecen las defensas del cuerpo”, señala Indira Pérez, nutricionista.

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Es importante consumir alimentos de todos los grupos alimenticios para asegurar que nuestro cuerpo reciba todos los nutrientes esenciales.

Según la especialista en nutrición, una dieta equilibrada debe incluir: frutas y verduras ricas en vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes.

Se recomienda consumir al menos cinco porciones diarias. También incluir proteínas como carnes, pescado, huevos, legumbres, frutos secos y semillas.

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Preferir granos enteros como arroz integral, avena, y pan integral, así como optar por grasas insaturadas presentes en el aceite de oliva, aguacate, frutos secos y el consumo de productos como leche, yogur y queso que proporcionan calcio y vitamina D.

Controlar las porciones y planificar las comidas

Es fácil excederse con las cantidades, lo que puede llevar a un aumento de peso y otros problemas de salud. Lo ideal es que se debe mantener un equilibrio entre lo que se consume y lo que se gasta en energía.

Pérez destaca que se debe comer despacio disfrutando cada bocado, evitando distracciones como la televisión o el teléfono y escuchar las señales de tu cuerpo para saber cuándo estás lleno.

Tener un plan de comidas semanal puede ayudarte a hacer mejores elecciones y evitar caer en opciones poco saludables.

Y por supuesto, debe complementarse con la actividad física regular. El ejercicio ayuda a mantener un peso adecuado, fortalece el sistema inmunológico y mejora el bienestar mental.

“Adoptar una alimentación saludable no implica seguir dietas estrictas o privarse de ciertos alimentos, sino hacer elecciones inteligentes y balanceadas que favorezcan tu salud a largo plazo”, dice la especialista.

Mantener una alimentación rica en nutrientes y variada, junto con otros hábitos saludables como el ejercicio, es clave para sentirte bien tanto por dentro como por fuera.

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