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La OPS llama a la vigilancia de mpox tras detectar variante clado I en las Américas

Hasta el momento el Minsa no han registrado casos en el país.


La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha emitido una alerta epidemiológica instando a los países de la región a reforzar la vigilancia de mpox, conocida también como viruela símica, tras la detección del primer caso de la variante clado I en los Estados Unidos.

Este caso ha encendido las alarmas sobre la necesidad de una respuesta oportuna para prevenir su propagación.

El caso fue reportado el 16 de noviembre de 2024 por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). El paciente tenía antecedentes de un viaje reciente a África Oriental, donde la enfermedad es endémica, y fue tratado poco después de su llegada a territorio estadounidense.

Las autoridades sanitarias actualmente rastrean posibles contactos, y hasta la fecha no se han detectado otros casos del clado I en la región.

Según datos de la OMS, entre enero de 2022 y el 31 de octubre de 2024 se notificaron 115,101 casos confirmados de mpox en 123 países, de los cuales 255 fueron mortales.

El mayor número de casos en las Américas se registró en 2022, con un pico en agosto de ese año. Desde entonces, los contagios han disminuido, y la mayoría de los casos en la región se atribuyen al clado II.

El mpox es una enfermedad zoonótica viral causada por un virus del género Orthopoxvirus. Los síntomas incluyen fiebre, dolores musculares, inflamación de ganglios linfáticos y erupciones cutáneas, que pueden durar entre dos y cuatro semanas. Aunque la enfermedad no suele ser letal, puede dejar secuelas visibles en la piel y causar incomodidad significativa a los pacientes.

Activan vigilancia

En Nicaragua las autoridades del Ministerio de Salud (Minsa) mantienen activa la vigilancia epidemiológica desde que se alertó sobre este virus en la región, sin embargo, hasta ahora no se han registrado casos en este país.

“Es fundamental que las familias y comunidades estén alertas ante signos como erupciones cutáneas, ya que pueden confundirse con acné juvenil o rubéola, pero podrían ser indicativos de mpox,” destacó el doctor Alejandro Lagos, experto en salud pública.

Así mismo, explicó que los signos más comunes son erupciones en la cara, las manos y otras áreas del cuerpo, que pueden evolucionar a ampollas llenas de líquido.

“La única manera de confirmar si se trata de mpox es mediante pruebas en laboratorios especializados, como las que se realizan en el Centro Nacional de Diagnóstico Conchita Palacio”, indicó.

La OPS ha insistido en la importancia de la vigilancia genómica, la detección temprana y el aislamiento de casos sospechosos. Aunque la vacunación puede ser una herramienta preventiva para los grupos de alto riesgo, no se recomienda la vacunación masiva de la población.

El especialista subrayó la necesidad de mantener medidas preventivas tanto en los hogares como en las comunidades: “El mpox se transmite a través de fluidos corporales, gotitas de saliva y contacto directo con lesiones infectadas. Lavarse las manos frecuentemente y manipular con cuidado la ropa o utensilios de personas con la enfermedad son acciones clave para evitar contagios”.

Además, destacó la importancia del saneamiento en el entorno doméstico, especialmente en zonas donde los roedores, que son reservorios del virus, podrían contaminar utensilios de cocina. “La higiene adecuada es crucial para prevenir no solo el mpox, sino otras enfermedades zoonóticas”, enfatizó Lagos.

El 14 de agosto de 2024, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, declaró que un repunte del clado Ib en la República Democrática del Congo y otros países africanos representa una Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional (ESPII).

En este contexto, Lagos recordó la relevancia del Reglamento Sanitario Internacional, que establece lineamientos específicos para viajeros provenientes de zonas endémicas.

“La vigilancia epidemiológica debe incluir la identificación de personas con erupciones cutáneas sospechosas y la educación de las comunidades sobre la importancia de reportar estos casos a las autoridades de salud”, señaló.

La OPS ha reiterado que los esfuerzos de vigilancia deben priorizarse para caracterizar la situación epidemiológica y responder rápidamente ante la introducción de variantes como el clado I. También resaltó la importancia de educar a la población sobre la identificación de síntomas y las medidas preventivas, para contener la propagación del virus.

“La clave para enfrentar esta enfermedad radica en la detección temprana, el aislamiento de casos y la conciencia comunitaria. Si actuamos a tiempo, el mpox no tiene por qué ser letal,” concluyó el doctor Lagos.

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