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Glaucoma, una complicación oculta de la diabetes
Origen de la enfermedad puede tener varias causas, entre ellas genético, dice oftalmólogo.
Febe Urcuyo, una mujer de 66 años de edad, perdió la vista de su ojo derecho. A ella le fue diagnosticado glaucoma, un daño colateral generado por la diabetes que padece.
Lo que más extraña a esta capitalina que habita en el barrio Waspam Sur de Managua, es la autonomía con la que antes hacía los quehaceres del hogar, pues ahora depende de sus familiares, quienes se convirtieron en el ojo que ya no le funciona.
“A mí me gusta ver arreglada mi casa, yo me hacía un colocho cuando estaba buena de saludo, extraño ese movimiento, eso me hace en falta, poder movilizarme sola”, puntualiza.
Urcuyo afirma que a pesar de que ya se realizó una cirugía, se niega a someterse a otra intervención, pese a que se la recomendó su médico de cabecera.
“El médico afirmó que me golpeó duro la retina la diabetes y fue lo que me dejo sin mi vista, yo me hice una cirugía que al principio me permitió ver mejor, pero ya actualmente ya perdí completamente la visión, ya no veo nada y en el ojo izquierdo hay un riesgo en esa cirugía que en lugar de mejorarme se riegue más la enfermedad”, cuenta.
El oftalmólogo doctor Douglas Acevedo, explica que el origen de la enfermedad puede ser genético o por abuso de corticoides, medicamentos que se usan para tratar la inflamación y el sistema inmunitario.
“Gotas, cirugías filtrantes y láser son el tratamiento común de esta enfermedad, pero no se cura, detectarlo temprano es la meta, para que mejore la calidad de vida del paciente”, recomienda.
El optometrista Isaac Valverde, explica que, si el paciente ve el contorno oscuro en alguno de sus ojos, tiene sensación de arena en el mismo, se le pone rojo el ojo, experimenta dolor ocular y náuseas, son síntomas de glaucoma.
“Si el paciente ve al perifiero, al entorno de la visión oscuro como túnel es caso de glaucoma y eso nos da un indicativo que tienen que acudir donde el oftalmólogo, si al paciente se le resalta el ojo, se le pone rojo, le dan náuseas, dolores de cabeza y dolor ocular esos síntomas de glaucoma”, expresa.
Subraya que en estos casos juega un papel fundamental la familia, para brindarle ánimos al paciente, puesto que, quien es diagnosticado con esta enfermedad en algún momento perderá la visión totalmente.
“Cuando siente que es una carga, es porque ellos ya no hacen las funciones que hacían antes y los que son los familiares a veces pueden motivar a que esa persona siga adelante, que no se desanime y que tenemos que convivir con esa enfermedad, saber que no es algo que nos va a matar, vamos a estar bien y que ese ser querido sienta que le tenemos amor tal y como es”, remarca Valverde.
El glaucoma es la primera causa de ceguera irreversible que afecta a más de 70 millones de personas en el mundo, según la Organización Mundial de la Salud.
De acuerdo a los especialistas, la detección temprana y el tratamiento adecuado pueden ayudar a evitar hasta en un 90% de la ceguera que provoca el glaucoma.
