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Insolación y golpe de calor, ¿cómo diferenciarlo?
Los primeros auxilios en estos casos son vitales para evitar infartos y convulsiones.
Las altas temperaturas en Nicaragua pueden provocar insolación o golpe de calor, sin embargo, hay diferencias marcadas en los síntomas de cada una y la atención primaria que se debe brindar, señala Maribel Estrada, directora del Instituto Safar.
Explica que el golpe de calor puede generar sudoración excesiva, pero fría, dolor de cabeza y temperatura corporal de hasta 40 grados, mientras que la insolación provoca piel seca y enrojecida por quemaduras del sol, además de debilidad, mareos y confusión.
“Recordemos que la sudoración excesiva te va a hacer perder sales minerales y eso hasta te puede provocar que te dé calambres y hasta que llegués a convulsionar, y hemos visto los casos, otro de los síntomas que nosotros vamos a ver son los vómitos y las náuseas”, destaca.
Ambas situaciones pueden provocar en la persona infartos o convulsiones que dejan serios daños neurológicos y en casos extremos la muerte, advierte la experta en primeros auxilios.
En caso de insolación, lo primero es colocarle al paciente compresas frías para mejorar su temperatura corporal, pero si se trata de un golpe de calor, lo indicado es darle pequeños sorbos de agua, aflojar su ropa y colocar a la persona semi sentada.
Cuando ocurre una insolación se tiene que acostar al paciente y elevarle los pies, recomienda Estrada.
“En estos eventos es vital enfriar la piel, darle agua en pequeños sorbos, nunca de un solo, porque su sistema puede estar hinchado y eso le hará mal más bien, es muy importante que las familias anden suero en su botella y se lo anden tomando con este calor”, puntualiza.
Alerta ante estos casos
El doctor Pablo Hurtado, médico cardiólogo, señala que si la persona cae de forma repentina sin síntoma previo, podría tratarse de un infarto, pero si hubo cansancio repentino demostrado y sensación de ahogarse, se trata de un desmayo o convulsión.
“En cualquiera de los casos lo primero es buscar un área fresca donde a la persona hay que colocarla, bajo un árbol, en un tramo donde esté dando sombra, humedecer la cara y el cráneo, eso ayuda a hidratarla”, finaliza.
Si la persona está sin pulso en el carotídeo, es necesario realizar las 30 compresiones, parte de la Reanimación Cardiopulmonar, según el experto.
“Hay que tomarle el pulso que queda en el carotideo, es decir, en cada lado del cuello, nunca el pulso de la mano, porque ese se puede ir, pero no significa que la persona se haya muerto”, finaliza.
Este domingo un infarto acabó con la vida de José Dolores Valenzuela Fuentes, de unos 70 años, en las cercanías del mercado Ernesto Fernández, en Masaya.
Testigos indicaron que, tras realizar compras y cargar una bolsa y un saco con frutas por varias cuadras, se sintió mal y se desvaneció, cayendo boca abajo sobre la acera.
También un vendedor de paletas de helados en el mercado Oriental, se desvaneció este fin de semana producto de las altas temperaturas.
El joven, que solo fue identificado como Norman, fue atendido por comerciantes, quienes llamaron a la Cruz Blanca para trasladarlo a un centro asistencial.
Al día siguiente le fue entregado por la Asociación de Comerciantes del Mercado Oriental el carro con el que vendía sus productos.