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Desarrollo en adolescentes, cambios emocionales y físicos

El especialista describe el desarrollo no solamente como cambios biológicos o físicos, sino psicológicos; por eso la importancia de ser claros, pero cuidadosos con los adolescentes en esa etapa.


Algunas personas conocen la etapa de desarrollo en el niño o la niña como pubertad, que constituye la transición de la niñez a la primera etapa de la adolescencia, donde se dan una serie de cambios físicos y emocionales.

Según Carlos Dinarte Mendoza, ginecólogo obstetra y especialista en ginecología infanto juvenil, estos cambios pueden ocurrir aproximadamente entre niñas y niños mayores de los ocho años a los doce años. Esta etapa está “marcada por el estirón en puberal, que es uno de los cambios más notorios que se dan en esta etapa” y uno de los últimos casos que se da en este proceso es, en el caso de las mujeres, la menstruación; que ocurre entre los 12 a los 15 años.

“Es importante que los jóvenes y no solo los jóvenes, sino el entorno familiar, cree las condiciones adecuadas para esta nueva etapa del adolescente y que esto represente una etapa transitoria relativamente sin complicaciones, puesto que existe un desfase (…) es bueno que desde edades tempranas se les empiece a informar sobre los cambios que pueden experimentar en diferentes etapas de la vida”, asegura el ginecólogo obstetra.

En ese sentido, el especialista afirma que la información es importante, porque esto permitirá que los adolescentes puedan sobrellevar la etapa del desarrollo, pues para muchos este período puede representar ciertos traumas o experiencias negativas si no se maneja de la manera adecuada.

“A veces nosotros (los padres) no sabemos abordar y no entendemos bien la etapa que están atravesando nuestros hijos, y eso puede ser un factor de riesgo para que nuestros jóvenes sin condiciones adecuadas desde el punto de vista emocional; no puede tomar decisiones adecuadas producto de conflictos que se originan en la familia”, explica el experto.

El especialista describe el desarrollo no solamente como cambios biológicos o físicos, sino psicológicos, por eso la importancia de ser claros, pero cuidadosos con los adolescentes en esa etapa; porque también cambia el entorno y su forma de ver la sociedad.

“Lo recomendable sería que haya más acercamiento con los jóvenes, la comunicación es fundamental, es básica. El conocer lo que está sucediendo con nuestros jóvenes, sí se puede requerir ayuda profesional (…) porque es importante una buena orientación hacia ellos (…) necesitamos informarnos, necesitamos orientarnos y que nosotros apoyemos para que seamos realmente ese soporte para los adolescentes” finalizó el especialista Carlos Dinarte Mendoza.